Según la investigación llevada a cabo por la Oficina Nacional de Investigación del Fraude (ONIF), el ex vicepresidente del Gobierno, Rodrigo Rato, habría defraudado cerca de 6,8 millones de euros entre 2004 y 2015, superando el umbral de delito fiscal (120.000€) en todos los ejercicios excepto en 2005.
La ONIF ha remitido al juzgado de instrucción número 31 de Madrid un escrito de más de 600 folios, al que ha tenido acceso el diario El País, que cuantifica en más de 14 millones de euros las rentas no declaradas en el IRPF en el periodo comprendido entre 2004 y 2015.
Según el informe de la ONIF, el sistema empleado para el fraude se basaba en "ganancias de patrimonio no justificadas derivadas del tráfico de dinero con el extranjero y no declarado fiscalmente; ganancias de patrimonio sin previa transmisión de rentas, rendimientos de actividades económicas como conferenciante y gastos de la actividad empresarial que no son deducibles".
El exministro y ex vicepresidente del Gobierno, asegura al periódico de Prisa que dicho informe “se origina en una denuncia, alzamiento de bienes, que sirvió para mi detención, aunque quedó demostrada su falsedad en 15 días. El informe contiene datos falsos o erróneos que la Agencia Tributaria tenía capacidad para conocer desde tiempo antes porque estaban en sus archivos". "Estoy estudiando el informe y lo contestaré", ha añadido Rato ante la publicación del escrito.
Entre los diversos capítulos del informe remitido al juzgado, se encuentran el referente al Hotel Alba de Layos, a los pagos realizados por CaixaBank por servicios de asesoría al banco catalán, así como al banco Santander. Los cobros se realizaron a través de COR. La ONIF asegura que se empleó esta misma táctica para pagar los servicios de asesoramiento que Rato prestó a Telefónica entre 2013 y 2015. Le produjeron un rédito de 730.000 euros “que debían haber sido declarados por el IRPF”.
También figura la firma Arada.S.L, una empresa legal empleada para cobrar dinero procedente de paraísos fiscales o para el cobro de conferencias. “Tiene crédito fiscal suficiente para que la tributación quede reducida a 0 euros”, dice el informe recogido por el periódico de Prisa.
Cuando Rato dejó la presidencia del Fondo Monetario Internacional, facturó a través de esta empresa 39 conferencias por casi millón y medio de euros. Según la información revelada este miércoles, la Agencia Tributaria estima que Arada se empleó para no tributar por otras actividades con un valor de 583.960 euros entre los años 2009 y 2012.