La presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, ha recordado este miércoles que Cataluña "nunca fue independiente", pese a lo que "se enseña en algunas escuelas", y por tanto no se pueden establecer paralelismos con Escocia, que "durante muchos años" fue un reino independiente de Gran Bretaña. Aguirre ha defendido que la educación debe servir para que los niños "aprendan a sumar, a leer y la historia verdadera, no la que inventan los nacionalistas". "España es una gran nación, con 3.000 años de historia. Eso lo tienen que saber los niños", ha remachado.
Aguirre, en su primera rueda de prensa tras renunciar a la presidencia de la Comunidad de Madrid, ha señalado que no concibe "una España sin Cataluña" ni "una Cataluña fuera de España", y ha comparado las aspiraciones soberanistas con una rama que se desgaja de un árbol: "el árbol sufre y la rama se seca", ha explicado. Ha asumido que "se puede reclamar todo" por vías "pacíficas y legales, también el separatismo", pero siempre desde el "respeto a la ley", y en este sentido ha recordado que la Constitución consagra que la soberanía reside en el pueblo español.
Aguirre no ha querido "adelantar acontecimientos" ante las consecuencias legales de que el presidente catalán, Artur Mas, convoque finalmente un referéndum. Sólo ha comentado que el Gobierno "tendrá que aplicar la ley" y que confía en que Mas, a quien ha recordado que es "la máxima autoridad del Estado" en Cataluña, "la respete".
La presidenta del PP de Madrid ha señalado que "los nacionalistas en general" siempre plantean "estas reivindicaciones", con el propósito de "echarle la culpa de todo a un enemigo exterior", incluida la deuda de 40.000 millones de la que, está convencida, "no tiene la culpa" Mas sino el anterior gobierno de coalición.
También ha roto una lanza a favor del ministro de Educación y Cultura, José Ignacio Wert, con quien está "totalmente de acuerdo con lo que hace y lo que dice", a propósito de su frase de españolizar a los escolares catalanes. Ha recordado que "esa idea no sale de Wert" sino de la conseller de Educación de Cataluña, Irene Rigau, y que luego "él responde que no le parece mal", y en todo caso ha recalcado que "la educación es para instruir, no para manipular a nadie".