Pocos días después de que la Audiencia Nacional anulara la multa que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) impuso a Repsol en 2015 por su política de fijación de precios y de descuentos en las gasolineras, el Grupo Socialista en el Congreso ha pedido la comparecencia en la Comisión de Economía, Industria y Competitividad del ministro Luis de Guindos y del presidente del ‘súper-regulador’, José María Marín Quemada, para pedirles explicaciones sobre los motivos que han llevado a que los tribunales hayan tumbado una parte de las sanciones dictadas por este organismo.
Los socialistas solicitarán a De Guindos que aclare la posición del Ejecutivo con respecto a los ”errores” de tramitación de los procedimientos sancionadores por parte de la CNMC, que han dado pie a que las empresas multadas recurran las resoluciones del regulador y obtengan la razón en la Audiencia Nacional o en el Tribunal Supremo, con la correspondiente condena en costas al Estado.
El grupo parlamentario también ha exigido la comparecencia “urgente” de Marín Quemada para que explique los supuestos fallos de gestión que han motivado estos varapalos judiciales. También le pedirá que depure responsabilidades en la institución que preside.
El presidente de la CNMC se refirió a este tema el pasado octubre en el Congreso, en respuesta a la pregunta de uno de los portavoces de la Comisión de Economía. “Hemos cobrado el 80% de las sanciones que se han impuesto. Cosa distinta es que quien quiera debilitar a la Institución o introducir dudas interesadas trate de instalar a través de los medios que las sanciones nunca se pagan. Eso es absolutamente incierto”, afirmó.
Cobro del 3% de las multas
En un informe enviado por la CNMC al Congreso hace unas semanas, se especifica que el organismo ha dictado 272 sanciones desde su fundación, en 2013, por un valor de 914 millones de euros. De esa cantidad, sólo ha recaudado 29,81 millones de euros. Es decir, un 3% del total.
El organismo atribuye sus problemas de recaudación al hecho de que que una gran parte de las empresas sancionadas recurran las multas ante la justicia, lo que paraliza el pago. A partir de ahí, las resoluciones de la CNMC inician un camino en los tribunales que se inicia en la Audiencia Nacional y que suele desembocar en el Tribunal Supremo.
Algunas de sus multas más elevadas han sido tumbadas o reducidas en la primera o la segunda instancia. En algunos casos, como el de Repsol, por cuestiones formales de las que se advertía en los votos particulares que apostillaron las resoluciones del organismo, como detalló Vozpópuli.
En declaraciones a Vozpópuli, la diputada socialista Ana Botella ha expresado su preocupación por las deficiencias de funcionamiento que -a su juicio- padece la CNMC, que se reflejan, entre otras cosas, en las diversas decisiones que han tomado los tribunales contra sus resoluciones.
"El Gobierno del PP unificó este organismo en 2013 para intentar mejorar su funcionamiento y ha fracasado en su intento, para perjuicio de los ciudadanos y de los mercados regulados (...). Inquieta especialmente su pérdida de credibilidad durante los últimos tiempos", ha incidido.
No hay que olvidar que PP, PSOE y Ciudadanos negocian desde hace varios meses la división de la CNMC en dos organismos independientes. Su idea es que uno de ellos se encargue de la promoción de la competencia y el otro, de la regulación de los mercados de la energía, las telecomunicaciones, los transportes, los servicios postales, el juego y el tema audiovisual.