La situación del sistema financiero catalán preocupa, y mucho, en las plantillas de CaixaBank y Banco Sabadell. La tensión entre los clientes ha hecho que las plantillas de ambas entidades tengan que remangarse durante toda la semana.
Por ello, el segundo sindicato de CaixaBank, CC.OO, ha trasladado a la cúpula una serie de peticiones. La principal es un "apoyo máximo y en todos los sentidos: cero presión comercial, cero reuniones y suspensión de toda la formación".
La segunda es que "esta situación excepcional se tenga en cuenta para el recálculo del bonus". Así, la salida de depósitos durante los últimos días -que según fuentes financieras está bajo control- supone a las oficinas una pérdida de negocio que no le permitirá cumplir objetivos. Y sin estas metas se quedarán sin paga variable. Como este salida se ha producido por algo ajeno a las sucursales, los sindicatos creen que no debe tenerse en cuenta.
El sindicato CC.OO recuerda que "la plantilla estamos viviendo momentos máximos de tensión y nervios por la situación tan complicada que vivimos". En una entrevista con RNE, el secretario del sector financiero de CC.OO, Joan Sierra, ha pedido calma y tranquilidad ya que "los depósitos están garantizados".
UGT-Sabadell
Mientras, en Banco Sabadell, uno de los principales sindicatos, UGT, ha aplaudido la decisión de mover la sede a Alicante. "Para la UGT la defensa de los puestos de trabajo es lo más importante, por lo que nos congratulamos de esta decisión que valoramos muy positivamente, ya que despeja la preocupación que estaba causando a la plantilla, rebaja la tensión que se estaba padeciendo en todos los centros de trabajo y garantiza la continuidad del empleo", señala.
Este viernes se espera una decisión similar de CaixaBank, anunciando que deja su domicilio social en Barcelona para llevarlo a Baleares, gracias al real decreto que ultima el Gobierno.
