Las señales de alarma que avisaban de la llegada de una tormenta financiera a RCS MediaGroup, la matriz italiana de Unidad Editorial, se han apagado temporalmente, después de que la compañía editora de medios de comunicación haya alcanzado un acuerdo con la banca para refinanciar la mayor parte de su deuda. Las negociaciones para suavizar las condiciones de pago de estos préstamos se han extendido durante varios meses, en los que la empresa ha confeccionado un nuevo plan estratégico -que incluye duros recortes- para tratar de convencer a los acreedores de su viabilidad. Finalmente, ha conseguido dos nuevas líneas de crédito por un montante de hasta 352 millones de euros, que estarán vigentes hasta el 31 de diciembre de 2019, según ha precisado RCS.
En concreto, la banca acreedora (Banca IMI, Intesa Sanpaolo, Centrobanca, BNP Paribas y Unicredit, entre otros) ha abierto dos nuevas vías de financiación para la compañía, con una primera que le proporcionará un crédito de hasta 252 millones de euros y una segunda en la que tendrá a su disposición hasta 100 millones. Esta operación ha incluido el pago de 71 millones de euros de un préstamo pendiente, una cantidad que procedía de los 127 millones de euros que la empresa ha ingresado por la venta de su principal negocio editorial (RCS Libri) a Mondadori, quien hasta el año pasado era su principal competidor en el mercado italiano.
Una abultada deuda
La llegada a buen puerto de esta negociación servirá para calmar los ánimos en Unidad Editorial, donde son conscientes de que los terremotos que se desatan en Italia suelen romper con la estabilidad en España. Ahora bien, pese a que este problema se ha solucionado, no conviene olvidar que la situación económica de la compañía es complicada, como se puede observar en sus últimas cuentas trimestrales, en las que reconoció una deuda de 509 millones de euros que era un 23,8% mayor que hace un año.
Sus accionistas deberán elegir en las próximas semanas si aceptan alguna de las dos OPAs que se han lanzado sobre el grupo. Una de ellas, está orquestada por Investindustrial, la gestora de capital riesgo del empresario milanés Andrea Bonomi, y en ella participan Diego Della Valle, dueño de Tod's y propietario del 7,32% de RCS, la aseguradora UnipolSai (4,59%), Pirelli (4,4%) y Mediobanca (6,25%). Esta última entidad, se ocupará del asesoramiento financiero.
Unidad Editorial recibirá antes del 30 de junio el dinero necesario para ejecutar los despidos previstos en su próximo ERE
El Consejo de Administración de RCS analizó a finales de la semana pasada los términos de esta oferta, de 0,70 euros por cada una de las acciones del grupo que no poseen sus emisores. Sus miembros concluyeron que, si bien la forma en que está planteada es positiva, el montante a pagar por cada uno de los títulos debe ser mayor.
A cierre de la última jornada de la Bolsa de Milán, cada participación de RCS valía 0,77 céntimos, por los 0,60 de la primera sesión de 2016 y los 1,16 euros de hace exactamente un año. La capitalización bursátil de la empresa es de 400,3 millones de euros, mientras que la oferta de Bonomi asciende a 287,2 millones por 77,4% de la compañía.
Cairo vuelve a la carga, contra todo pronóstico
Quien ha replanteado los términos de su OPA, pese al sonoro portazo que le dieron los dueños de RCS en su primera propuesta, es Urbano Cairo, el magnate al que en Italia apodan el 'mini-Berlusconi' y el presidente del Torino Football Club. El empresario ha incrementado un 33% la oferta por cada acción y ha avanzado que sus planes pasan por fusionar su conglomerado mediático con la editora de Corriere della Serra y La Gazzetta dello Sport en un plazo de uno o dos años.
Dentro de la editora de El Mundo, consideran que el horizonte que se presenta en España si -como todo parece indicar- triunfa la OPA de Bonomi estaría mucho más despejado que en el caso de que el apodado 'mini-Berlusconi' se hiciera con el control de RCS MediaGroup. Entre otras cosas, porque eso implicará el mantenimiento del mismo equipo gestor y del plan 2016-2018 en el grupo, que no contempla la venta de ninguna de las cabeceras españolas.
En cualquier caso, mientras se resuelve esta situación, los responsables de Unidad Editorial aguardan la llegada desde Italia de la remesa de dinero que permitirá aplicar el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que firmaron hace unas semanas la empresa y los sindicatos. Esta partida está previsto que llegue antes del final de julio y, a partir de ahí, se ejecutarán los despidos previstos.
