El día en que se cumple exactamente un año desde la polémica generada por los trajes de los reyes magos en la cabalgata de Madrid, la alcaldesa de la capital ha ironizado que aunque tiene "muy poca relación con Oriente", les ha hecho llegar a sus majestades el mensaje de que la ciudad "es muy exigente y que a los madrileños les interesa una vestimenta muy lujosa".
Por otro lado, Manuela Carmana ha hecho un balance positivo de las medidas adoptadas por el episodio de contaminación de la semana pasada y ha señalado, en una entrevista en la cadena Ser, que “se cumplió, hubo pocas sanciones y hubo un buen comportamiento ciudadano”. Sobre la acusación de que fue una medida ideológica vertida por Esperanza Aguirre y el grupo municipal del PP, Carmena ha reconocido que no la sorprendió. “Es una forma de actuar destructiva”, ha incidido. Sin embargo ha expresado que la relación con Aguirre es “muy buena”.
Sobre la peatonalización de la Gran Vía durante las fechas navideñas, Carmena ha explicado que esperan hacer balance de lo que ha supuesto para los comerciantes, pero ha asegurado que su equipo tiene el propósito de peatonalizar esta calle durante la legislatura. Por otro lado, ha explicado que en ese plan se contempla que puedan circular los medios de transporte público como taxis y autobuses.
Por otro lado, Carmena ha hablado sobre la decisión del grupo municipal socialista de no apoyar los presupuestos y ha explicado que se les “echaron encima las fechas”. Si bien ha remarcado que, como señalo su concejal de Hacienda, Carlos Sánchez Mato, “no hay criterios objetivos para rechazar esas cuentas municipales”. “A pesar de haber tomado esa decisión, no quieren perjudicar la marcha del Ayuntamiento”, ha remarcado sobre el PSOE. Además, ha negado que el grupo municipal haya cambiado su actitud desde que el partido está gobernado por una gestora. “Este partido es una oposición, pero a la vez es un apoyo”, ha añadido.
Sobre la división interna de Podemos, la alcaldesa de Madrid ha evitado pronunciarse. Y sobre las tensiones en las filas de su propio gobierno municipal ha dicho que "la dificultad de la cohesión no es que los concejales se sientan vinculados a unos u otros partidos, sino que es mucho más determinante el carácter de cada uno”.
