Todas las posibilidades están abiertas. Pese al hermetismo que ha mostrado en las últimas semanas sobre su hoja de ruta ante la consulta independentista del 1 de octubre, el Govern ha deslizado este martes una posibilidad: que las leyes de desconexión puedan sacarse adelante sorteando al Parlament y mediante la herramienta del decreto ley.
Así lo ha sugerido este martes el conseller de Presidencia y portavoz del Ejecutivo catalán, Jordi Turull, después de que la Mesa del Parlament haya vuelto a descartar incluir en el orden del día del próximo pleno -que se celebrará el 6 de septiembre- la aprobación de las leyes de ruptura. En rueda de prensa, Turull ha manifestado que existen "muchas vías" para aprobar tanto la Ley del Referéndum, que daría amparo a la consulta del 1-O, como la Ley de Transitoriedad Jurídica y Fundacional de la República, centro de las llamadas "leyes de desconexión", ya que permitiría crear un marco legal alternativo al español en caso de que ganara el 'sí' a la independencia.
Entre esas vías, el conseller ha mencionado la posibilidad de que el Govern utilice la herramienta del decreto ley o que recurra al artículo 81.3 del reglamento de la Cámara para alterar el orden del día de un pleno en el último momento; todo sin desvelar más detalles sobre los planes de la Generalitat antes de la votación.
"Que nadie sufra -ha aseverado-. La determinación de hacer el referéndum es total y el 1-O los ciudadanos votarán. Con tiempo suficiente todo el mundo sabrá dónde deberá ir a votar, todo el mundo tendrá información precisa y perfecta", ha insistido, asegurando que lo que importa no es el "cómo", sino el "qué".
Turull también se ha referido a la exigencia de la CUP de que ambas leyes se aprueben en el pleno de la próxima semana, asegurando no estar sorprendido. "Estoy acostumbrado, cada fuerza es muy legítima de pedir lo que considere, del mismo modo que han de entender que, si esto saliera mal, nos mirarán a nosotros y no a ellos. Pedimos que se respeten nuestros 'tempos", ha detallado.
Pero el conseller ha evitado en toda su comparecencia dar pistas sobre el calendario y procedimientos que seguirá el Govern para la convocatoria del referéndum, bajo el argumento de que las "leyes de desconexión" aún no están aprobadas por el Parlament y, cuando así sea, el ejecutivo catalán dará "todos los detalles".
"Cuando haya convocatoria del referéndum, el Govern dará todo lujo de detalles de todo el operativo. El reto no es dónde están las urnas, sino cuán llenas estarán", ha dicho, y ha subrayado que "si las urnas están llenas y el resultado es claro, la comunidad internacional evidentemente reconocerá el referéndum".
Desoirán al TC "con todas las consecuencias"
Turull también ha advertido hoy de que el Govern desoirá al Tribunal Constitucional (TC) si anula la Ley del Referéndum y solo "obedecerá el mandato" del Parlamento catalán, "con todas las consecuencias" que pueda acarrear. "Les puedo asegurar que el Govern será absolutamente leal al mandato que salga del Parlament. Obedeceremos al Parlament, con todas las consecuencias".
"Nos debemos a los ciudadanos y al Parlament. No nos movemos en términos de desobedecer o no acatar, sino que tenemos claro que lo que obedeceremos es el mandato de los ciudadanos y el Parlament porque eso es la democracia", ha afirmado.