Dos años después de que la policía lograra dar caza al presunto pederasta de Ciudad Lineal, Antonio Ortiz se sentará este martes en el banquillo de la Audiencia Provincial de Madrid, acusado de secuestrar y abusar sexualmente de cuatro niñas de entre cinco y nueve años. El presunto violador mantuvo en vilo durante casi un año a los padres madrileños hasta que los agentes lograron detenerle el 24 de septiembre de 2014 en Santander, donde permanecía escondido en casa de unos familiares. Desde aquella fecha, ha estado en prisión provisional.
Todo comenzaba en septiembre de 2013, cuando abordó a una niña de 5 años en un parque infantil de Madrid. La segunda agresión tuvo lugar en abril de 2014. La víctima en este caso era una niña de 9 años que salía con dos amigas de un quiosco. En junio, Ortiz volvía a engañar a otra menor de seis años, a la que montó en su coche para llevarla a un lugar apartado. A los dos meses, en agosto, cometió la última de sus agresiones, contra una niña de 7 años, cuando ésta se separó un momento de su hermano y de su tío, con los que estaba jugando junto a un parque.
Ortiz se enfrenta ahora a penas que oscilan entre los 126 y los 26 años de prisión, aunque lo cierto es que no cumplirá más de 25, debido al artículo 76.1 a) del Código Penal vigente en la fecha en que ocurrieron los hechos. El Ministerio Público responsabiliza a Ortiz de tres delitos de agresión sexual, uno de violación, cuatro de detención ilegal y uno de lesiones. Por estos cargos solicita una pena total de 77 años de cárcel, además de 40 años de libertad vigilada una vez cumplida la pena de prisión. Por otra parte, exige una indemnización de 426.300 euros para las cuatro niñas por los daños físicos y morales y que no pueda volver a acercarse a ellas a menos de un kilómetro o que pueda comunicarse con ellas.
Pero las acusaciones particulares piden una condena superior a la solicitada por el fiscal, llegando hasta los 126 años de cárcel en el caso de una de las familias. Dos acusaciones populares presentes en el juicio, la asociación de mujeres Clara Campoamor y la Asociación Laxshmi, piden 79 y 120 años de prisión respectivamente. Esta disparidad en relación a las penas que se solicitan para el presunto violador se deben a que, mientras que unas partes le imputan homicidio en grado de tentativa y cuatro delitos de lesiones, el fiscal sólo le imputa uno.
Por su parte, la defensa del acusado solicitará la absolución, pues considera la existencia de pruebas que pondrían de manifiesto la inocencia de su cliente. Además, antes de eso pedirá que el proceso judicial sea declarado nulo, alegando que las ruedas de reconocimiento y los registros efectuados no se ajustaban a derecho. Todo apunta a que el pederasta de Ciudad Lineal se negará a declarar ante el fiscal y ante las acusaciones. Tampoco parece que lo vaya a hacer ante su abogado. Desde que fue detenido, Ortiz mantiene su inocencia y niega su participación en las violaciones.
El juicio que arranca este martes está considerado como uno de los grandes procesos judiciales del año tras el del Madrid Arena. Precisamente la sala encargada de enjuiciarlo es la misma que dictó sentencia por la tragedia en la que cinco jóvenes murieron aplastadas. La duración estimada del juicio contra Ortiz es de dos meses y dará inició con su declaración. A continuación serán visionados los vídeos que recogen los testimonios de las víctimas, grabados precisamente para evitar que las niñas tuvieran pasar por los tribunales. Además, están llamados a declarar cerca de cien testigos entre policías y familiares. Antonio Ortiz, que deberá estar presente en la sala en todas las jornadas y tendrá posibilidad de hacer un último alegato el día 15 de diciembre.
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