"Ha sido un auténtico tsunami". Con esta palabra japonesa describía el Sindicato de Estudiantes el seguimiento que los alumnos, profesores y padres han hecho de la huelga contra las 'reválidas' que han convocado junto con la Ceapa y la Federación de Asociaciones de Estudiantes Progresistas (Faest). Nunca mejor dicho. Si bien la jornada se desarrollaba sin incidentes en Madrid, la protesta de un grupo de militantes de Acción Socialista en un rincón del continente asiático terminaba con un grave altercado.
El incidente ocurrió un par de días antes en el Consulado de España en Hong Kong, cuando algunos miembros de HK Socialist Action, una organización política de Hong Kong afiliada al Comité Internacional de Trabajadores, irrumpieron con sus pancartas de "solidaridad" con la manifestación que se estaba cocinando en España en rechazo a los exámenes finales que plantea la Lomce para los alumnos de tercero y sexto de Primaria, al término de la ESO y Bachillerato. El 'asalto' a la institución acabó involucrando al mismo cónsul, Santiago Martínez-Caro, a quien la prensa local ha bautizado como el "primer cónsul general multimillonario", según indican los jóvenes en su web.
Según Acción Socialista, dos "compañeros fueron violentamente agredidos" y señalan como atacante al propio cónsul
Según Acción Socialista, dos "compañeros" fueron violentamente agredidos y señalan como atacante al propio Martínez-Caro. Además, los manifestantes denunciaron que les habían requisado los teléfonos móviles por lo que tuvieron que llamar a la policía para recuperar los dispositivos. Para mostrar su apoyo a la protesta asiática y a la huelga del 26-O, un legislador de la asamblea de Hong Kong, Leung Kwok-hung, conocido como Long Hair (Pelo largo), asistió al consulado, un respaldo celebrado por la organización que terminó reprochando la respuesta de los representantes del gobierno español: "Están claramente muy preocupados por la huelga y el apoyo y difusión internacional que está teniendo (…) La respuesta violenta del consulado en Hong Kong no tiene precedentes —hay docenas de protestas todos los días y casi nunca pasan cosas así".
La versión difiere de la del Ministerio de Asuntos Exteriores. Según han manifestado fuentes de la Oficina de Información Diplomática (OID) al diario El Mundo, las cinco personas "ocuparon violenta e ilegalmente" la zona de atención al público y grabaron "sin autorización" lo que hacían y a las personas que estaban en el lugar, incluido personal del consulado. En medio de la polémica, efectivos de seguridad del consulado habrían avisado a la policía y confiscaron dos móviles, que posteriormente fueron devueltos. Las personas, aseguran las mismas fuentes de la OID, "se negaron a borrar imágenes". La Oficina está pendiente de que la policía emite su informe de lo ocurrido para "valorar si se llevan a cabo acciones legales".
Huelga y 'selfies' en Madrid
A las 12 del mediodía de este martes, miles de estudiantes acudían a Atocha, en Madrid, para participar en la manifestación contra las 'reválidas franquistas'. En la capital, al contrario que en Hong Kong, la huelga se ha desarrollado sin incidentes graves y ha finalizado en la Puerta del Sol alrededor de las 14.00 horas. Aunque una treintena de personas, con la bandera republicana atada al cuello, permanecía gritando consignas como "Madrid será la tumba del fascismo" o "Obreros y estudiantes, unidos adelante", había otros que aprovechaban para hacerse 'selfies' con sus pancartas. Entre ellas, destacaban mensajes como "No a la LOMCE", "No a las reválidas" y "No es el examen lo que importa, sino nuestro futuro", además del "No es no" acuñado al ex dirigente socialista Pedro Sánchez ante la investidura de Mariano Rajoy que este 26O los escolares han tomado prestado para rechazar la 'reválida'.
"Un sindicato de estudiantes nos informó sobre la LOMCE nos pareció bien manifestarnos en contra de lo que nos parece una injusticia. En esos exámenes te puedes jugar el curso entero y no es justo", protestaba un grupo de alumnas de 15 años del Instituto Cervantes.
Ante las protestas a lo largo y ancho del país, un tranquilo Íñigo Méndez de Vigo visitaba el Archivo Simancas. Según el ministro de Educación en funciones, la huelga estudiantil transcurría como "una jornada tranquila sin que haya ninguna repercusión negativa". Además, se escudaba en el siguiente mensaje: "cuando haya un gobierno, tomará las medidas necesarias" para alcanzar un pacto educativo. Esa "tranquilidad" es la que ha pedido a docentes, familias y alumnos, a quienes ha prometido que se va a "hacer un pacto nacional por la Educación" en el que se abordarán "cosas importantes", como el Estatuto de la Función Docente y un plan de convivencia contra el acoso escolar.
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