Podemos estará presente el próximo 27 de mayo en la nueva edición de las 'Marchas de la Dignidad'. Así lo decidió el núcleo duro de Pablo Iglesias, junto a los militantes asistentes, en la tercera asamblea estatal de Vamos!, la plataforma del área de Sociedad Civil del partido. Esta iniciativa está concebida como el laboratorio de ideas para "tomar la calle" en la nueva estrategia lanzada tras Vistalegre II.
En ediciones anteriores, la dirección de Podemos siempre trató de guardar cierta distancia con las 'Marchas de la Dignidad', aunque participaran en ella responsables del partido a título individual. Sin embargo, ahora, la consigna es implicarse en este tipo de movilizaciones y visibilizar sus reivindicaciones. Uno de los postulados que defienden las 'Marchas de la Dignidad' es el impago de la deuda soberana en la Unión Europea, algo en lo que Podemos había suavizado su argumentario.
En su programa electoral para el 26-J, la organización morada abogó por una "reestructuración" de la deuda pública vinculada a las "ayudas públicas al sector financiero, el memorando de entendimiento y el rescate de la Unión Europea". Fue en noviembre de 2014, a raíz de presentar el documento Un proyecto económico para la gente, cuando el partido del círculo matizó la propuesta de "impago" de la deuda que llevó a las elecciones europeas de mayo y empezó a hablar de "reestructuración".
Y así ha sido hasta ahora. Sin embargo, uno de los lemas de las 'Marchas de la Dignidad', que cuentan ya con el apoyo expreso de Podemos, subraya: "Por el no pago de la deuda. UE y FMI fuera ya de aquí". Así mismo, el manifiesto señala que "el gobierno del PP y demás gobiernos de todos los colores, ejecutan al dictado de la Troika (Fondo Monetario Internacional, Banco Central europeo y Comisión Europea), políticas consistentes en el robo de derechos y el empobrecimiento generalizado de la mayoría social. Estas políticas que se fundamentan en el pago de una deuda ilegítima que no han contraído los ciudadanos y ciudadanas, son producto de la especulación bancaria y los excesos de los distintos gobiernos", sostiene el llamamiento.
El llamamiento al 27-M señala que los gobiernos "ejecutan al dictado de la Troika" políticas consistentes en el "empobrecimiento generalizado"
Junto a ello, considera que "la aplicación del Tratado de la Zona Euro de 2012 impone a todas las administraciones públicas, incluida la Seguridad Social, objetivos de déficit destinados a adelgazar sin límites el gasto público en servicios sociales y las pensiones públicas". El manifiesto recoge también que "el drama del pueblo griego y la aceptación por el gobierno de Syriza de todas las imposiciones de la Troika, incluso con la victoria del 'no' en el referéndum, muestra con toda claridad cómo la UE y el Euro actúan como camisa de fuerza para ahogar la soberanía popular". Por todo ello, reza el llamamiento, "es preciso promover la lucha y la unión de la clase obrera y de los pueblos de Europa".
Los errejonistas, ausentes
A la tercera de asamblea de Vamos!, donde participaron inscritos, simpatizantes y movimientos sociales, acudieron el propio secretario general, Pablo Iglesias, la portavoz parlamentaria, Irene Montero, o los diputados Rafael Mayoral, responsable de Sociedad Civil de la formación morada, Ana Marcello, Alberto Rodríguez, Isabel Franco o Diego Cañamero, una de las caras protagonistas en anteriores 'Marchas de la Dignidad' al encabezar la columna de Andalucía siendo dirigente del SAT. También asistió y tomó la palabra el cofundador de Podemos y exsecretario de Programa, Juan Carlos Monedero.
En cambio, los afines al exnúmero dos y actual secretario de Análisis Estratégico y Cambio Político, Íñigo Errejón, no se dejaron ver por la asamblea. De este modo, el sector moderado no participó en la adopción del acuerdo por parte de la plataforma Vamos! para secundar el 27-M. La decisión fue luego ratificada por el Consejo Ciudadano estatal de Podemos, donde los pablistas tienen mayoría absoluta.
El último encuentro de Vamos! sirvió, según el propio partido, para recalcar la necesidad de "echar raíces en territorios y generar grupos locales" y de "profundizar en los conflictos sociales y laborales". Además, en esta cita se consensuó también respaldar una movilización en "defensa de las pensiones" fijada para el 18 de mayo.
