El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, ha recibido este sábado el Nobel de la Paz en el ayuntamiento de Oslo, un galardón que, según ha señalado, demuestra que "lo imposible puede ser posible" porque la guerra ha terminado en su país.
Un emocionado Santos ha recogido el diploma y la medalla que lo acreditan como Nobel de la Paz "en nombre de todos los colombianos" y, en especial de las víctimas, en una ceremonia celebrada en el Ayuntamiento de Oslo ante un auditorio de más de mil personas.
"La guerra que causó tanto sufrimiento y angustia a nuestra población, a lo largo y ancho de nuestro bello país, ha terminado", ha destacado Santos, quien ha defendido la necesidad de construir "una paz estable y duradera".
"Tributo al pueblo colombiano"
Santos, galardonado por sus "esfuerzos decididos" para acabar con la guerra, ha resaltado que el Nobel fue un "regalo caído del cielo", como "el viento de popa que nos impulsó para llegar a nuestro destino: ¡el puerto de la paz!".
Junto al jefe de Estado han estado las siete víctimas, entre las que destacan la ex candidata presidencial Íngrid Betancourt y su ex asesora Clara Rojas, que han viajado en representación de los ocho millones de afectados por la guerra en Colombia.
El Comité Noruego anunció el 7 de octubre que el Nobel de la Paz de este año era para Santos por sus "esfuerzos" por llevar la paz a Colombia, aunque se trata también de un "tributo al pueblo colombiano", según ha recalcado este sábado su presidenta, Kaci Kullmann.