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Traidor

Después de este jueves no hay nadie que pueda ponerlo en duda: el presidente del Gobierno es un traidor a la Constitución, a España y a los españoles.

Después de este jueves no hay nadie que pueda ponerlo en duda: el presidente del Gobierno es un traidor a la Constitución, a España y a los españoles. Vendió su progenitura, no por un plato de lentejas, sino por siete votos de unos golpistas que practican el racismo más profundo existente a día de hoy en Europa. Pero hay algo peor que ser traidor y es, además, ser un tonto a las tres con balcones a la calle con macetas. Porque si cree el felón que con la amnistía se finiquita el proceso sepratista lo tiene claro. Lo ha dicho el, por cierto, calladísimo Rufián durante estos días de campaña catalana: siguiente estación, el referéndum de independencia. Pero lo dice también Puigdemont, y lo dice Junqueras, y lo dicen las CUP y hasta lo dice el PSC con esa cara de Santa Genoveva de Brabante que se le ha quedado a Illa. “Hombre, si es pactado y se hace con criterio democrático…” Otro que tal baila cuando se trata de defender sus mantenencias. Me dicen que están en el parlamento catalán con una sierra de calar recortando la mesa de la Cámara para impedir que entre VOX en la misma, porque, uy, los de VOX, son malísimos, son la extrema derecha, los fachas, el involucionismo, la concatenación de los elementos, el despiporre y el cáguense por los Canarios. Las CUP, Arran, Junts o Esquerra, que tenían a Tsunami Democràtic y sus huestes bloqueando aeropuertos, vías de ferrocarril, carreteras e incendiando media Barcelona, no, esos son unos santos y ni se te ocurra llamarlos ultraizquierdistas porque te acusarán hasta de ser el toro que mató a Manolete.

¿La amnistía? Es un asunto gravísimo aunque, si lo examinamos de cerca, no deja de ser un brindis al sol

Si quieren hacer un análisis en profundidad – aunque ¿para qué?, si los españoles tenemos memoria de pez – todo lo que vemos es pura cortina de humo. ¿La amnistía? Es un asunto gravísimo aunque, si lo examinamos de cerca, no deja de ser un brindis al sol porque va a tardar en aplicarse dado que las CCAA donde manda. el PP interpondrán recurso, junto a muchas asociaciones de la judicatura, además de VOX y alguno más que lamento olvidar. ¿Begoña? Efectivamente, eso lleva veneno vivo en lo que se menea y hay mucha ruina, dicen. Pero, y perdonen por ser tan insistente, lo gordo es lo que pueda hacer Israel con el dossier sobre Sánchez que los analistas del Instituto y su director, David Barnea, están revisando minuciosamente. No solo el Mossad. El resto de agencias israelitas como la Militar, AMAN, la de Seguridad Interna, Shinbet, e incluso el Krav Magá, la escuela donde los operativos israelíes se forman y constituye un Think Thank de mucho nivel, han recibido directrices sobre el mozo fermoso. Consultadas otras fuentes, no son los únicos. Los Renseignements franceses, el BND alemán, la DIA estadounidense o el MI6 británico han empezado a ocuparse de ese señor que está en España tocando lo que no suena a Occidente. Sánchez empieza a estorbar a mucha gente, además de a los españoles.

¿Begoña? Efectivamente, eso lleva veneno vivo en tó lo que se menea y hay mucha ruina, dicen

El traidor cuenta con que, pasado el verano nadie recordará lo sucedido este día de infamia en el que aquellos que juraron cumplir y hacer cumplir la Constitución la apuñalaron por la espalda, perdonando a delincuentes por pura bastardía política. No digo yo que no, cosas más gordas parecen haberse olvidado. Ahí tienen a los bilduetarras cogobernando España. Pero si algo es seguro es que Israel no olvida. Nunca. Tiene una memoria perfecta para acordarse de quien les traicionó y quién no. Abascal ha podido comprobarlo en su entrevista con Netanyahu. No tienen nada en contra de los españoles, al contrario; en contra de Sánchez, Yoli y esa banda de los cuatro, sí. Todo eso se acaba pagando, como que la Fiscalía Europea se haya metido de lleno en la trama Koldo. Y esa fiscalía no depende de ti, traidor. Aunque, a fuer de sinceros, no podemos quedarnos con ese apelativo a Sánchez. Es traidor a su patria y a la democracia, sí, pero también es tonto, ya lo hemos dicho. Porque, aunque él no lo crea, de ésta no saldrá de rositas.

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