Actualidad

Trasladan a España a los presuntos autores del robo millonario de botellas de vino en Atrio

Ambos tienen antecedentes penales por hechos similares cometidos en restaurantes de Madrid, previos al robo perpetrado en Cáceres

Los detenidos del robo de las 45 botellas en el hotel y restaurante Atrio, en Cáceres, comparecen este jueves en los juzgados de la capital cacereña, según han informado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura.

Los arrestados, un hombre de 48 años y con doble nacionalidad (rumana y neerlandesa) y una mujer, de 28 años y natural de México, viajarán desde Croacia, país donde fueron detenidos el pasado mes de julio, en el marco de un proceso de extradición cuya causa lleva el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 4 de Cáceres.

Sus comparecencias en la instrucción de la causa será a puerta cerrada, si bien ambos se pueden acoger a su derecho de no declarar.

Ambos tienen antecedentes penales por hechos similares cometidos en restaurantes de Madrid, previamente al robo perpetrado en Atrio, según expusieron responsables de la Policía Nacional durante la rueda de prensa ofrecida el pasado 20 de julio cuando se dio a conocer su detención.

La localización y detención de ambos en el puesto fronterizo croata de Karasovici Sutorina, cuando viajaban desde Montenegro, fue fruto de un trabajo de investigación y coordinación de la Policía Nacional en colaboración con agentes de EUROPOL e INTERPOL.

Sin embargo, no hay rastro del botín millonario: 45 botellas, de las que 38 son Romanée Conti, con un precio medio de 12.000 euros en la carta del restaurante cacereño; un Montrachet Grand Cru 1999 Magnum, con un valor de 25.500 euros, y "la que más dolió" a los gerentes de Atrio, Toño Pérez y José Polo, un Chateau d´Yquem de 1806, valorada en 310.000 euros.

Por ello, la declaración de los ahora detenidos -si así se produce- es determinante para tratar de localizar las botellas robadas el 27 de octubre de 2021.

Aquel día, con documentación falsa y con la planificación del robo bien estudiada -estuvieron alojados hasta en tres ocasiones en los meses previos-, ambos se registraron en el hotel y cenaron en el restaurante del establecimiento, donde visitaron la bodega invitados por el personal, una práctica habitual con los cliente por parte de este establecimiento.

Posteriormente, subieron a la habitación y, momentos después, el hombre abandonó la estancia para dirigirse al sótano donde se encuentra la bodega. A su vez, la mujer bajó a la recepción para distraer al empleado con la excusa de que le prepara algo de comer a pesar de que la cocina ya estaba cerrada.

Después de acceder con una llave maestra, previamente sustraída al restaurante, el hombre accedió a la bodega, y minutos después, salió con tres grandes mochilas, una en cada mano y otra a la espalda en las que portaba 45 botellas de vino, cuyo valor ascendía a 1.648.500 euros.

El robo fue descubierto a la mañana siguiente cuando los autores ya habían abandonado el hotel.

Apoya TU periodismo independiente y crítico

Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación
Salir de ver en versión AMP