El director del Museo Reina Sofía, Manuel Borja-Villel, ha apostado hoy por un nuevo modelo cultural ante los "duros" recortes que imponen los Presupuestos Generales del Estado para 2012 y que, en el caso de este centro de arte, ha cifrado en un 17 por ciento.

En declaraciones a Efe, Borja-Villel ha explicado que la dotación de 42,32 millones destinados al Reina Sofía son los presupuestos consolidados y que son 33 millones los que este año "le cuesta" al Estado este museo.

"Son recortes muy duros, pero no tenemos derecho a quejarnos. No sirven las políticas de lamento, sino que hay que buscar soluciones alternativas", ha recalcado el responsable del Reina Sofía, centro que este año se integra por primera vez dentro del capítulo de organismos públicos autónomos.

Según Borja-Villel, aunque la cultura "es un derecho por el que hay que batallar", es obvio que la actual "es otra época", pues el modelo financiado por lo público ha terminado.

No obstante, ha destacado la necesidad de seguir luchando por mantener el servicio público de la cultura porque, mientras algunos proyectos conseguirán fácilmente ser patrocinados, otros no tanto y, por ello, "hay que exigir a las instituciones" que sigan apoyándolo.

El director del Reina Sofía ha explicado que este museo ya apuesta por un sistema público-privado, por trabajar en red y por entender el centro como una estructura global, consciente de que lo que hace a una institución diferente es la educación.

Si la oferta son "grandes producciones, espectáculos" y "edificios de autor", habrá un recorte de cara al público pero si se trabaja con las colecciones, con la coproducción y otras formas de "pensar" proyectos, "ahí la crisis no puede ser una excusa", ha defendido