Cultura

Andrés Calamaro: "Un cantor se gusta pero no se aguanta"

La mayor estrella del rock en castellano presenta en el festival Río Babel la gira de 25 aniversario de 'Honestidad brutal'

Veinticinco años después de publicar su obra maestra, la más clara aunque no la única, Andrés Calamaro está de aniversario con la gira Agenda 1999. Ya no es el superventas con el pelo en llamas que celebró sus 37 años publicando aquellas 37 canciones pero sigue siendo el rey del rock en español. Creó una fértil escuela con Los Rodríguez y si hoy no tiene más imitadores es porque pocos tienen nivel para poder imitarlo. Comprar una entrada para verle garantiza un pedazo de historia de la música popular en nuestro idioma. Está claro que aportó grandeza al rock en español en un cambio de milenio en el que el género agonizaba, arrinconado por el hip-hop, la electrónica y el hipsterismo narcisista. Calamaro resucitó el legado de la música de guitarras según la fórmula de Mahler: "Honestidad brutal" no rinde culto a las cenizas, sino que mantiene vivo el fuego.

Empezamos con una comprobación de rutina: ¿el título de su nueva gira es un chiste a costa de la Agenda 2030? "Podría ser una alusión soterrada y graciosa: Puede interpretarse como ironía que alude a las delirantes propuestas de las degeneradas agendas globales. 1999 saluda -además los últimos compases del siglo pasado en tanto tocamos casi todas canciones del repertorio de Honestidad Brutal. El Rock n Roll, mientras tanto, se compromete en “gustar y ofender”, históricamente ofende a una moralidad extenuante", explica. Luego añade una nota de las suyas, crípticas y poéticas: "Ser amable es mas importante que ser inteligente; el “stand Up fascista de Ezra Pound” (seudónimo) era una forma de alborotar las sobremesas, sensible a operetas, a mitad de camino entre la amabilidad y la inteligencia, aliada del sentido de un humor inquietante", explica.

En esta gira se interpretan muchas canciones de Honestidad brutal que no hatocado nunca. Eso me hace pensar que parte de la crítica escribió de ese álbum era "un doble que podría quedarse en simple" pero 25 años después diría que no sobra ninguna. ¿Cree que ha ido creciendo con el tiempo? "Dejo 'abandonados' los discos una vez que los termino, pero hace poco  armamos una versión extendida y ahora lo estamos tocando, las canciones renacen en la viruta de los escenarios. Es un disco largo para tocarlo entero en vivo, eso sí. Puede ir `'creciendo' como una novela, o una película, a la que volvemos durante la vida", comparte.

Diría que “Clonazepán y circo” contiene claves para entender el hartazgo y el malestar social que atenaza a Argentina hace varias décadas. Me refiero a unas élites corruptas y desconectadas del pueblo. ¿Está de acuerdo? "Contemplando que el repertorio de 1999 era crítico con los mecanismos liberales contemporáneos, tenemos que suponer un escenario donde 'liberalismo y socialismo' alimentan élites opulentas, hubiéramos dicho lo mismo en 1933.  Digamos que, en nuestro país, no es imposible adivinar en futuro en una canción".

Cantar es como torear: se persigue la naturalidad, la verdad, la quietud, el barroco, lo clásico o el triunfo como puesta en escena

Recuerdo como muy intensos los dos conciertos de La Riviera para presentar Honestidad Brutal. ¿Es complicado cantar hoy estas canciones febriles 25 años después y casi sobrio? "Cantar es complicado por  el compromiso. Distinto las grabaciones o cantar en la ducha. La excusa válida es interpretar mejor en el siguiente recital.  La música siguiente, la partitura silenciosa que espera el embroque. Un cantor se gusta pero no se aguanta, siempre se puede cantar mejor". ¿Qué está disfrutando más de esta gira y qué se te hace más cuesta arriba? "Estoy disfrutando bastante. Tampoco soy un músico regular ni infalible; está fuera de mis posibilidades. Cantar es como torear: se persigue la naturalidad, la verdad, la quietud, el barroco, lo clásico o el triunfo como puesta en escena. 'Vida, fuerza, energía, efervescencia del espíritu, alegría, vivacidad, , magnetismo, inspiración, exuberancia, valor, felicidad'.  Definición de jazz. 'La música en la que una misma nota se puede tocar noche tras noche siempre de un modo distinto'. Creo que la gira me da la oportunidad de explorar o acceder a este laberinto.

En su época, se acusó a Honestidad Brutal de ser demasiado derivativo del legado de Bob Dylan. Hoy creo que nadie diría eso, ya que es un disco muy variado, ¿no cree? "No tengo disciplina para escuchar discos y grabar cosas parecidas, un algoritmo creativo es mas complejo y no es imprescindible empaparse de influencias literales. Dylan es un letrista extranjero, aprecio en el los detalles que puedo descifrar en el fraseo como cantante, la introducción poética en letras de canciones, la entrega al oficio, la vida en los escenarios, verlo y saber que existe, clásico -pero no barroco- crooner minimalista que nunca canta igual dos veces la misma canción, jazz. Es verdad que giramos patrocinados por Bob Dylan en 1999".

 Se cuenta que en la grabación de Honestidad Brutal estaba tan volcado en componer que comía y dormía muy poco. Su mánager, Olga Castreno, le dejaba sándwiches en el teclado por si le entraba hambre y se animaba a picotear. ¿Qué recuerda de esas grabaciones extenuantes? "Escribía en el estudio, con los amigos esperando para grabar canciones flamantes. Empezamos con sesiones informales y no terminamos hasta nueve meses después. Terminábamos en un estudio cuando era imposible forzar los horarios, y seguíamos en otro estudio de grabaciones accesorio; una orgía digna de fechas limites en los calendarios. Era el momento preciso para multiplicar el catálogo de canciones y experiencias limítrofes asociadas con el santo grial del rock hedonista. El insomnio nos abre puertas insospechadas, la cárcel con las puertas abiertas...", como reza la letra de "Media verónica".

Para un número significativo de oyentes y periodistas (entre los que me incluyo) Honestidad brutal es el mejor disco de rock en español. Me gustaría preguntarle cuál es para usted el mejor y por qué. "Manal (primer disco). Es refinado, instrumentalmente virtuoso, suena muy bien mas de cincuenta después de grabarse, es porteño pero universal y contiene grandes textos y canciones que cantamos toda la vida. 'No hay que reducirse a una obra, solo decir algo que pueda susurrase el oido de un vagabundo o un borracho', dicen en Paris", recuerda..

¿Diría que hay recambio para el rock en español? Sinceramente no veo apenas Loquillos, Bunburys, Urrutias y Calamaros de veinte años y capaces de tomar el relevo tras vuestra abdicación. "Tampoco nos consta la necesidad (o importancia) de encontrar relevos para todos.  'Serás lo anónimo,' advierte Atahualpa Yupanqui. Estos caballeros hicieron mucho para ser, apostaron fuerte por ellos, se cultivaron como aristócratas callejeros, universales y culturales, y consolaron a generaciones en la soledad, el amor y la muerte", concluye.

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