Cultura

Cecilio G, la entrevista perdida: "Me han diagnosticado de todo esos asesinos de neuronas"

El polémico trapero volvió a la actualidad el domingo cuando la policía tuvo que pararle los pies en las fiestas de Sitges. Vozpópuli publica una entrevista inédita a corazón abierto en 2015 con la que ningún otro medio se ha atrevido

Sala Silikona. Moratalaz. Madrid. Sábado 21 de diciembre de 2015. Diez de la noche. El rapero, grafitero y videoartista barcelonés Cecilio G sale al escenario cubata en mano, en avanzado estado de embriaguez. En los cuarenta minutos que dura su actuación, cae rodando por el suelo, le come los morros a un fan, cuenta chistes surreales y balbucea rimas perdidas, esbozos de un trap de efectos retardados que cosecha miles de admiradores y otros tantos detractores.

La venida de Cecilio G a Madrid se esperaba como agua de mayo. Como se mete con todo el mundo, muchos antagonistas habían amenazado con venir a ajustarle las cuentas. Al final no ha venido ninguno, así que cuando Ceci baja del escenario nos vamos de fiesta juntos por un Madrid apocalíptico que huele a pis, a basura y a base de coca. Nos acompañan un puñado de fans, varias grupis, una banda de grafiteros y mis colegas Dre y Molina. A lo largo de siete horas de juerga, con ayuda de un desvencijado móvil, entrevisto al rapero a salto de mata. Esto viene a ser lo que, entre ruidos y alaridos, he podido salvar de esas grabaciones intermitentes.

Pregunta: ¿Quién es Cecilio G?

Respuesta: Pues un macarra sin causa que a partir de un punto empezó con el grafiti y el rap y ha acabado haciendo versiones de Barry White con Lou Reed. (Risas). Soy el más punki de todos los raperos y mi inspiración es el mundo. Lo siento, el mundo está enfermo y yo también lo estoy.

P: Tus padres te bautizaron como “Juan Cecilia Ruiz” y antes te hacías llamar “Punky negro”. ¿Por qué has acabado poniéndote “Cecilio G”, que viene de “Cecilio Grosero”?

R: Aunque me llamase Abraham triunfaría. El nombre… me quedó raro. No suena tan duro. O quizá suena demasiado duro para que lo pronuncien los demás. Yo no soy un friki, soy un monstruillo, soy un bicho raro.

P: ¿De qué clase social procedes? Se te ve callejero pero también con cierto savoir faire.

R: Yo era de clase media-alta, de Bogatell. Mi padre era médico y mi madre obrera. Pero mi padre murió cuando yo tenía 8 ó 9 años y me eché a la calle. He vendío porros, he estado de vagabundo, he estado en prisiones, he estado en psiquiátricos, me han dao pastillas, me han dao gotas que me han dejao to zumbao… He sufrido alucinaciones de la droga… Me han diagnosticado de todo, esos asesinos de neuronas.

P: ¿Cómo diste con tus huesos en la cárcel?

R: Me metieron por robo con fuerza. También le desfiguré la cara a un yanqui turista: quería pillar coca y ni llegamos de lo pesado que era; entonces, no sé, cuando yo me enciendo… Le íbamos a timar, que nosotros somos españoles y aquí eso de robar está feo. Una noche loca, vaya.

P: ¿Es más chunga la cárcel que el psiquiátrico?

R: Depende el psiquiátrico y depende la cárcel; los dos son duros. Pero no apoyo a la medicina tropical, nadie es un sano de cabeza, simplemente la gente se pregunta cosas o no quiere ni contestarlas, la gente tiene la respuesta dentro de sí, sino nunca llegaremos al día de mañana. Yo me entiendo.

P: ¿Qué te dijo tu madre cuando te vio con esa cruz tatuada en la frente?

R: Me dijo: “¿Qué te has hecho?”. Le dije: “Una cruz”. Me contestó: “Estás loco, estás zumbao perdido”. La primera excusa que doy para haberme tatuado la frente en la cruz [sic] es que no sólo Cristo murió en la cruz: miles de señalados murieron en la cruz. Vosotros veis una cruz pero yo no la veo, tengo dos ojos antes que ella. Quizá la cruz es un tercer ojo. El mundo está muy mal.

P: ¿Qué sería de ti si no fuera por tu madre?

R: Yo creo que en toda etapa de una persona el pensamiento acude a él y empieza a desconfiar de todo tipo de personas. Cuando esto ocurre, en la primera que hay que confiar es en tu madre. O sea, yo he caído en la droga y he recurrido a mi madre, yo he tenido problemas, he ido a Narcóticos Anónimos gracias a mi madre, luego he recaído y… nadie te va ayudar mas que tu familia. No me avergüenzo de decir “narcóticos anónimos”, porque tú te expones a la sociedad y te machacan.

P: Cuando vi tu cruz me acordé Charles Manson, que se tatuó una esvástica en la frente. Charlie también hacía muy buena música, y tú usas una base inspirada en una de sus canciones, así que supongo que te mola.

R: Cuando llegas a la categoría de monstruo, eres un genio. Por eso creo que Manson es un genio: era inteligente, él inventó el dinero o eso ha dicho en una entrevista. He de confesarte que yo estoy escribiendo un libro, que se titula En la escuela nos conocimos, en la calle nos veremos, pero jamás he conocido a una persona como tú ni tú a una como yo. Voy por el capítulo cuatro y Manson es la clara aparición de ese capítulo.

P: Hablemos de tus otros tatuajes.

R: No me lo tomo en plan traje vital. Poco a poco y que tenga sentido. Y que quede precioso. En mi tripa, por ejemplo, tengo un dragón Pokemon, debajo están el yin y el yang, y al otro lado una master ball. Y en mis puños llevo a la Pantera Rosa y a Huckleberry Hound, que representan la unión entre hombre y mujer, en mí. Solo llevo un tatuaje que considero negativo, en el pecho: un búho encima de una botella de vino tumbada.

P: Hablando de monigotes, ¿los tebeos te gustan?

R: Me mola el comic europeo, americano, animación americana rollo Hanna-Barbera… Con todo esto quiero decir que no perdáis la niñez, por favor, ser infantes, dejad este rollo de hombre contra otros hombres, somos personas, moriremos todos igual. Respetémonos u os mato, os reviento.

Soy una persona que le da mucho al coco y he tenido que dejar el speed porque casi me revienta la cabeza una vez

P: ¿Juan y Medio o Emilio Aragón?

R: No es uno mejor que otro, hay que respetar al anciano y hay que respetar al braguetazo. Sólo digo eso. Hay que contestar a nuestros abuelos. Pero a mí, sinceramente, me gusta más Juan y Medio. Pero la música no es para mí , es para todo el universo, así que en mí, Juan y Medio, pero fuera, Emilio Aragón. ¿Por qué voy a dar Juan y Medio si tengo las dos? Es empatía y ya está.

P: ¿Y Mané, el amigo de Emilio Aragón? (Risas)

Mané, Mané… ¡Haz una raya ya, joder! (Risas).

(Se acerca una joven y me quita la grabadora): Hola, me llamo Irene Pérez, Irene Pérez… ¡Irene Pérez! A ver, Cecilio, quería decir que palabras tuyas, como “praw” o “toyaco”, se están poniendo muy de moda entre los jóvenes. ¿Qué te parece?

R: "Toyaco” lo llevo escuchando desde hace más de quince años. Y mi influencia en los jóvenes me da igual. Les quiero decir que van a comer mierda toda la puta vida. Quiero decir que, la mitad de los que lo hagan por dinero, morirán; y la mitad de los que lo hagan por amor, sufrirán. El amor siempre gana, chavales. ¿Y qué quiero decir con esto? Drógate bien, folla, discute.

(Recupero la grabadora y disparo): Ceci, ¿tú te drogas bien?

R: Yo droga he tomado de todo. La droga no es mala, la droga no tiene personalidad. Pero drogarse ocupa tiempo y no tiene demasiado beneficio, simplemente es remover las emociones que hay dentro de ti. Deberían legalizar la droga y ponerla a buen precio, eso después de que cambie todo el sistema económico o su maquinaria o su escala de valores.

P: ¿Cuál es tu droga favorita?

R: La anfeta. El speed. (Se oyen voces de Molina de fondo: “¡Venga, vamos a hacer una raya de una puta vez!”). Mira, yo soy una persona que le da mucho al coco y he tenido que dejar el speed porque casi me revienta la cabeza una vez. Y siento mucho todo lo que digan de que soy retrasado pero es mentira, aunque yo no voy a decir tampoco que soy muy listo.

P: ¿Y tú vendes droga como otros traperos o solo la tomas?

R: Ahora no. Solo fumo y vivo. He tenido que dejar la droga muchas veces. Por mucho que en internet me llamen yonki, si no tengo pa pagar no me drogo, porque next level es chuparla por droga. Y, señores, ahí es cuando tú eres la droga de otro tío, supongo que muy poco habilidoso para ligar. Así que no, no vendo droga: hago arte.

P: De alguna manera has seguido el camino de Picasso, que empezó dibujando bien y acabó haciendo monigotes. Tú empezaste rapeando de forma más ortodoxa y ahora hace una especie de trap deconstruido o, si quieres, anormal.

R: Sí, cuando hago música soy Pablo y cuando hago show soy Salvador. Yo me desmarco totalmente, rompo con todo. Mis letras son abstractas porque lo que da feeling no es la pistola, sino el sonido del disparo. Soy un genio, no un diccionario. Pero mi sonido no es mío: me molan Max B, French Montana, Chinatown, los Buzzcocks, Eskorbuto, RIP, Animales Muertos, Golpes Bajos… Mi ritmo musical es copiado porque no soy yanqui, soy español y hago hip-hop gilipollas.

P: Y a ti también te copian, sobre todo otros raperos.

R: No creo para nada que nadie me copie, no creo que nadie sea tan gilipollas de decir las tonterías que yo digo. Ahora, tampoco creo que haya nadie tan valiente como para decir lo que piensa.

R: Siguiendo con tus influencias, también eres muy fan de Siniestro Total. En tus canciones reciclas frases suyas y hasta haces una versión de “Cuanta puta y yo que viejo”.

R: Sí, dentro de la Movida punk son el grupo más duro e inteligente, no como los Pegamoñas. Así que yo les copio, les robo los estribillos, les robo las letras… La SGAE me la come, yo soy una persona que no saca ningún tipo de beneficio de la música. Siniestro Total es un grupo diez a nivel nacional, pero yo soy un rapero diez a nivel nacional porque hago lo que me sale de la polla y elegantemente.

R: Ejem, bueno, pasemos al tema de los Pobres. Tu eras amigo de PXXR GVNG, ¿no?

R: No, yo era PXXR GVNG. Tu compras mi disco Robots N Unicorns y por detrás ya pone PXXR GVNG 2013 pero… los ahora llamados “PXXR GVNG” no tienen nada que ver con lo mío. Es como comparar un botijo con una máquina de coser. Antes nos respetábamos y ahora no, pero en verdad el que accedió a la violencia fui yo. Me suda los cojones.

P: ¿Te refieres al guantazo que le diste a Yung Beef?

R: Sí, yo de Fernando he aprendido mucho y esto lo tienes que poner. Le golpeé

porque su jugada no era clara. Me gusta la gente que habla con respeto y sinceridad. Pero si quieres hacer lo tuyo, no me metas en medio para tomarme por tonto. Somos unos criajos ridículos, pero yo acepto mi ridículo y por lo tanto no tengo nada que esconder.

P: Según el budismo, cuando le has partido la cara a Yung Beef, en realidad te estabas pegando a ti mismo: ¡le estabas pegando a Cecilio G!

R: No. Porque si no sería rico de la música. Y por suerte o desgracia vivo del azar. Yo mi disco lo compraría. Vale más de lo que vale.

P: ¿De qué disco me hablas?

R: El que sea, cada uno tiene lo suyo. Por suerte llevo los bolsillos vacíos, y eso me hace desplazarme.

P: ¿Y con Kaydy Cain que tal?

Contesta Leticia, una amiga de Cecilio: Mira, Kaydy es la peor persona del mundo, haciéndose tu amiguito para luego metértela doblada.

Cecilio: Kaydy, nada malo, ya nos veremos, tú ya me entiendes… Kaydy, no hay perdón de Dios. Kaydy, te has pasao, que ya llevas un par de rounds que te digo “para ya” y no paras.

Yo no voto. Estoy en contra de tener que elegir un perfil de guillotina

P: Con Pimp Flaco y Kinder Malo también has acabado malamente, ¿no?

R: No voy a hablar mal de ellos; siguen siendo unas personas pero no tienen los mismos valores que yo. Yo no puedo juzgar a otro ni leer sus pensamientos. Pero si te dan la pócima de la música, que es el grito del corazón en ritmo, no te puedes aprovechar de ello.

P: En el trap español todo el mundo habla de violencia pero sois muy pocos los que llegáis a las manos.

R: La violencia no es hablar, es un sopapo y punto. Cada día tengo que emplear la violencia, a veces más suave y otras a fuego. Mi madre me ha pegao siempre sopapos que me han hecho aprender más de la vida que cualquier frase de un rapero. Que os follen.

P: Por otro lado, un montón de gente te amenaza por Internet, y cuando por fin actúas en Madrid no viene ni el Tato a pegarte. ¿Qué ha pasado?

R: Sí, gente como los Takers me tenía que haber matao, pero parece que me han respetao. Pues nada, muchas gracias por no matarme, Takers.

P: Un progre te diría que en tus temas le tiras a otros raperos, pero no a políticos, a banqueros, al rey…

R: Yo no voto. Estoy en contra de tener que elegir un perfil de guillotina. Políticos y banqueros están cavando la tumba de su estirpe y nadie los querrá el día que estén muertos. Y el rey no existe, el único rey soy yo.

(Molina me arrebata la grabadora de un manotazo y pregunta): Antes estabas más gordo. ¿Cómo has logrado adelgazar?

R: Cárcel preventiva, reinserción, dejar la droga, convivencia en pareja, volver a la droga y de las que adelgazan y un poco de deporte. Y comer un poco de marca blanca de cualquier súper. Ahí lo tienes.

(Tras recuperar la grabadora, insisto): Así que has tenido jeva.

R: Sí, estuve viviendo con una novia, pero me escapé de casa porque tenía mucha dependencia y el amor tendría que ser incondicional, hacia cualquier ser humano, hijo de puta. Después de dejarlo con mi ex, compartí piso con un gran amigo y, al final, acabé viviendo en la calle día sí, día también, excepto cuando tenía que follar, que implicaba ducharme dos veces. (Se dirige a una grupi, le da un morreo y dice): Un momento, tía, espera un poco que enseguida vamos a follar al váter.

P: Siguiendo con temas escabrosos, un día subiste un video a Instagram en el que se veía to negro y se escuchaba tu respiración fuerte y agitada, como si estuvieras follando.

R: No, estaba corriendo por unas vías de metro, no era follar. (Risas).

P: Entonces nunca has hecho porno, ni siquiera fundido en negro.

R: De momento, no. Y si hago porno será un videoclip mío.

P: Eso nos lleva a las mujeres. ¿Te gustan las mujeres, Cecilio?

(Contesta una grupi): Yo le gusto, yo le gusto.

P: ¿Tú que eres, fan de Cecilio?

(La grupi): No, no soy fan de Cecilio, Cecilio no te escucho. A ver, le molas a mi piba, pero yo a ti no te escucho. Vino de Asturias a verte y a...

(Cecilio): Pero es que hoy estoy ocupao, esta ha venío de Málaga a lo mismo.

P: Qué lejos, ¿no? Menudo peregrinaje. ¿Y solo para verle a él?

(La grupi): Bueno, y también un poco al Jarfaiter y al Coleta.

P: ¿Tú eres una grupi?

(Se lo he preguntado a la chica, pero contesta Cecilio): Sí, soy grupi, me he follado a la Mala Rodríguez, pero no lo pongas. Me la he follao cuatro veces en dos días, ¿sabes lo que te quiero decir? Me he corrido en su boca, se lo ha tragao, pa que me entiendas. Me da igual que lo pongas.

P: ¿Cómo liga tanto Cecilio G?

R: Bailo. En un garito el que triunfa es el que baila solo. Si no se descuida quizá se de cuenta de que se ha soltado… y un pibón se ha fijado en su soltura de esqueleto.

P: Julio Iglesias se ha follado unas 4.000 tías en 73 años. ¿Cuántas te has follado tú en 23?

R: No me da vergüenza decirlo, pero no te puedo decir una cifra. Muchas, y seguro que hay alguna que me lo dice y no lo recuerdo para nada. Y ahora mismo me voy a follar a otra. Venga, tía, vamos al baño.

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