Hoy le habríamos mandado una notificación al móvil poco después del hundimiento, podemos especular en la redacción de la misma: "El Titanic, el barco más lujoso del mundo se hunde con más de 2.200 personas", al momento se posicionaría como Trendic Topic en X y los informativos abrirían explicando la tragedia. En 1912 el público tuvo que esperar hasta el 16 de abril para enterarse del funesto primer y último viaje del crucero que hizo titular con partículas en condicional a 'The New York Times', "El Titanic se hunde cuatro horas después de chocar contra un iceberg; 866 rescatados por el Carpathia, probablemente 1250 fallecidos". La cifra siguió ascendiendo hasta los 1.517 muertos hoy confirmados entre las 2.223 personas que viajaban a bordo. La noticia tuvo un impacto mundial y días más tarde llegaba también a la primera página de los medios españoles, creando del hundimiento un mito universal que sigue vivo. En la época despertó un interés excepcional en personajes como la escritora gallega Emilia Pardo Bazán que una década después del hundimiento se interesó por cómo habían afrontado la catástrofe diez supervivientes españoles.
La pérdida de los familiares, saberlos ahogados o congelados en mitad del océano fue el inicio del calvario de decenas de familias que nunca encontraron el cuerpo de su ser querido. Sin difunto que enterrar no se pudo completar el duelo de una muerte trágica ni rehacer la vida desde un punto de vista legal. El cadáver era necesario en las leyes españolas para poder acreditar la muerte e iniciar el proceso de herencia o ampararse en la condición de viudedad para poder iniciar un nuevo matrimonio.
Partiendo de estos datos reales, la escritora Carmen Posadas da una vuelta de tuerca e imagina a la escritora gallega investigando la "resurrección" de uno de los tres españoles que perdieron la vida en el barco en El misterioso caso del impostor del Titanic. La intriga detectivesca que desarrolla Posadas se apoya en la historia real de una trama de falsos cadáveres a la que tuvieron que recurrir muchos supervivientes. Una de sus protagonistas de la novela es Doña Pura, dama de la alta sociedad madrileña y amiga de Doña Emilia Pardo Bazán. Madre de Víctor Peñasco, uno de las tres víctimas del naufragio del Titanic, nunca recuperó el cuerpo de su hijo, pero decidió comprar otro cadáver, para resolver el futuro de su nuera Pepita.
Víctor Peñasco, uno de los españoles que murieron en el Titanic
Mezclando realidad y ficción, la intriga sigue los pasos de la investigación de la escritora gallega y uno de sus amigos, el detective Ignacio Silva. Años después del hundimiento, entra en contacto con este una dama adinerada de Avilés con una noticia insólita: su hermano, un indiano millonario que había sido dado por muerto en el naufragio, aparece en su mansión de La Habana para susto primero y alegría después de su viuda. Tras la sorpresa inicial, se despierta la sospecha en la familia. ¿Ha vuelto ese hombre de entre los muertos o no es más que un impostor?
Es una historia donde la línea entre la realidad y la ficción se desvanece, permitiéndonos viajar a una época vibrante y marcada por profundos cambios: los albores del siglo XX. Este relato no solo nos acerca a detalles insólitos sobre el naufragio más célebre de la historia, sino que también entrelaza un tema de resonancia actual: las migraciones. A través de sus páginas, el lector descubre las duras circunstancias en que vivieron muchos emigrantes españoles que, impulsados por la esperanza, partieron hacia América con la promesa de un destino más próspero. Este libro, con su mirada profunda y comprometida, da voz a aquellos que atravesaron el océano en busca de una vida mejor y retrata las dificultades y sacrificios que enfrentaron en su camino.
Según ha confesado Posadas, llegó a la historia a través del magistrado Manuel Marchena que en una cena contó a la escritora la desgracia de Pura. Después de esta conversación, la escritora, fascinada desde niña con la leyenda del Titanic, siguió investigando y descubrió la trama de la compra de cuerpos. Sobre estas historias construyó esta novela, llena de aventuras, misterios, enigmas, intriga y también análisis y crítica social.
La escritora Carmen Posadas
