El próximo miércoles 26 de octubre la Plataforma Estatal por la Escuela Pública, que agrupa a sindicatos, padres y alumnos de distintas organizaciones, entre ellas el Sindicato de Estudiantes y la Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos (CEAPA), convocan a la Huelga de Enseñanza, un paro de actividades que incluye al personal docente, así como educadores infantiles de centros públicos y concertados, además del personal docente y los educadores de todos los centros educativos de titularidad privada.
Todos ellos, con apoyo de los sindicatos de CCOO, UGT y STES, exigen la derogación de la Ley Orgánica para la mejora de la calidad educativa (Lomce), la retirada del Real Decreto de las “reválidas franquistas”, que es como llama el Sindicato de Estudiantes a las evaluaciones finales que ha establecido la legislación al terminar de cursar la ESO y el Bachillerato. Asimismo, piden la revisión y reversión de los recortes impuestos por el gobierno.
“En principio la huelga es solo ese día, pero tenemos muy claro que el día 26 no termina nada. Hasta que echemos atrás las reválidas franquistas atrás”,
Ana García, del Sindicato de Estudiantes, ratifica a Vozpópuli que la convocatoria incluye ESO, Formación Profesional y se amplía a educación infantil y primaria por la convocatoria que los padres han hecho. “En principio la huelga es solo ese día, pero tenemos muy claro que el día 26 no termina nada. Hasta que echemos atrás las reválidas franquistas atrás”, dijo.
Este huelga es la primera estudiantil este curso y la tercera desde que Íñigo Méndez de Vigo es ministro de Educación. La protesta se produce además en la misma semana en la que está previsto que el Rey cierre la ronda de consultas para buscar candidato a la investidura con el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, al que ha convocado la tarde del martes. No son pocos los reveses que le espera entonces al titular de educación.
Estudiantes al ministro: nos vemos en la calle
Las fuentes del Ministerio de Educación contactadas por Vozpópuli aseguran que existe poca voluntad de diálogo de parte de algunos componentes, como el Sindicato de Estudiantes, que ni siquiera “comprende” la definición de aquello que exige sea retirado. "Esas evaluaciones no son una reválida, son una reforma. Es un mecanismo que se usa en 24 de los 34 países de la OCDE y con muy buenos resultados", aseguran los portavoces de la cartera de Educación.
Desde el despacho de Educación señalan la poca vocación de diálogo de los estudiantes. Estos devuelven el mismo argumento a Méndez de Vigo
Desde el despacho de Educación señalan la poca vocación de diálogo de los estudiantes que convocan la huelga. Durante las reuniones informativas y de negociación con el ministro realizadas en septiembre, no sólo declinaron el saludo a Íñigo Méndez de Vigo, sino que apenas ofrecieron comentarios y señalamientos técnicos. Asimismo, los portavoces de Educación consultados aseguran que los estudiantes desconocen el contenido real de lo que protestan ya que "esas evaluaciones no tendrán efecto académico durante este curso".
Los estudiantes tienen argumentos completamente distintos. "Lo que dicen desde el Ministerio no es cierto. En estos 4 años nos hemos movilizado una y otra vez en nuestra protesta. Hemos dicho qué estaba mal y cómo arreglarlo. Lo que no vamos a hacer es prestarnos a esa reunión, que no era para dialogar sino para hacerse una foto con nosotros, como una muestra de que aceptábamos sus recortes. Vale ya de maniobras y cabriolas para presentarse como lo que no son. Es lamentable la situación en la que están colocando a millones de familias. Se lo dijimos al ministro: nos vemos en la calle. Es el único lenguaje que entienden”, aseguró Ana García en conversación telefónica con Vozpópuli.
"Lo que no vamos a hacer es prestarnos a esa reunión, que no era para dialogar sino para hacerse una foto con nosotros, como una muestra de que aceptábamos sus recortes", dice Ana García, del Sindicato de Estudiantes
Aseguran que esas evaluaciones son un modelo pedagógico desfasado, concebido como una sucesión continua de exámenes configurados como barreras que pretenden impedir a gran parte del alumnado ejercer su derecho a la educación. "Los alumnos que no superen las reválidas, aunque tengan todas las enseñanzas superadas, quedarán fuera del sistema educativo, su futuro académico y laboral se verá gravemente afectado” explica Teresa Juzgado UGT-Madrid, del Sindicato Enseñanza."Claro que tienen efectos estos exámenes, sobre todo de titulación. Este año no pero si esto siguiera adelante tendrá efectos de titulación. Porque el estudiante se lo juega todo a un examen que elaboran personas ajenas al centro”, explica Teresa Juzgado. Además, dice que esas pruebas “cuestionan y deslegitiman el trabajo del docente y ponen en duda la evaluación continua que el docente realiza y su conocimiento del alumnado con el que trabajan”.
"No es la selectividad, como se dice, sino peor, son tres selectividades que cierran las puertas a la educación superior", una en cuarto de ESO, otra al final del Bachillerato y una tercera que podrían hacer las universidades de manera opcional, ha explicado a Vozpópuli la secretaria general del Sindicato de Estudiantes, Ana García. Está previsto que el día 26 las Federaciones en toda España se unan a esta huelga. Ese mismo día, en Madrid, hay convocada una manifestación a las 18.00h con el recorrido Neptuno-Sevilla.
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