Las protestas identitarias de la nueva izquierda irrumpen en el Festival de Sitges. La crítica de cine Mariona Borrull ha presentado su renuncia como jurado del Premio Brigadoon Paul Naschy de la Sección Brigadoon debido a la “total ausencia de cineastas mujeres y no binarias en la selección”. Borrull, tras dar a conocer su decisión al celebre festival, que celebra su 57ª edición, expuso sus razones en una misiva publicada en X: “Creo firmemente que la paridad se consigue solo a la práctica, incluyendo a mujeres y personas no binarias en nuestros line-ups”. Y justificó: “Nunca me consideraría feminista si con mi silencio fuera cómplice de un programa injusto”.
La réplica del certamen se produjo asimismo en redes sociales, donde el director Àngel Sala compartió un comunicado en el que lamentó la decisión de Borrull, pero aclaró que “siguiendo las directrices de la FIAPF, el festival no solicita información personal que ataña a la identidad sexual de los realizadores”. De esta manera, no pueden “confirmar ni desmentir” que haya cineastas no binarias entre los nueve cortometrajes seleccionados.
Por otra parte, expuso que en la programación completa de la Sección Brigadoon figuran “excelentes trabajos dirigidos por mujeres”. Y que en los últimos años se han llevado a cabo acciones como las residencias para futuras cineastas femeninas, “hechos tangibles” que evidencian su compromiso con el “talento femenino dentro del fantástico”.
Finalmente, Sala marcó distancia con los preceptos del movimiento woke al concluir su misiva destacando que siempre ha “creído en el talento, sin cuotas de ninguna clase”. “La calidad y la idoneidad de las producciones, según cada sección, son los criterios más importantes y relevantes a considerar”, manifestó.