Cultura

Guillermo Solana: El Thyssen puede sobrevivir sin Caja Madrid

En declaraciones a los periodistas, el director del Thyssen ha dicho que el fin del acuerdo que el museo mantenía con Caja Madrid para su programa expositivoles obliga a cambiar "todos los planes" pero no les impide seguir adelante.

El director artístico del Museo Thyssen-Bornemisza, Guillermo Solana, se ha mostrado convencido de que la institución, tras perder la colaboración con Caja Madrid, puede sobrevivir sin patrocinadores gracias al "éxito de público" de sus exposiciones.

En declaraciones a los periodistas tras participar en un curso sobre Acción y Gestión Cultural en la Universidad de Verano de Aranjuez, Solana ha recordado que recientemente, a causa de la crisis en las cajas de ahorro, ha concluido el acuerdo "estable" que el Thyssen mantenía con Caja Madrid para su programa expositivo, lo que les ha obligado a cambiar "todos los planes".

"Hemos tenido que ajustar los presupuestos y hacer economías", ha señalado a la prensa el director artístico del museo, quien precisó que la nueva situación obliga a "ser más austeros y recortar gastos", así como a depositar todas sus esperanzas en los "resultados de público" de sus exposiciones.

En este sentido, ha recordado que la exposición actual dedicada a Hopper, "con gran éxito", no cuenta con patrocinador, y la de Gaughin el próximo otoño "tampoco lo tendrá", a pesar de lo cual esperan que cuente también con una gran aceptación por parte del público ante la dificultad de encontrar patrocinador en los tiempos que corren.

"Podemos seguir así", ha reconocido hoy Solana, descartando que el programa expositivo del museo corra peligro por la ausencia de patrocinadores, aunque ha reconocido que, cuando hay mecenazgo, los proyectos tienen "mayor soltura".

No obstante, ha expresado el deseo del equipo de dirección del Thyssen de que "en un par de años, la situación mejore lo suficiente como para que el patrocinio vuelva", aunque ha recordado que el museo tiene otras fuentes de ingresos además de la venta de entradas, como la tienda, "que funciona muy bien", y unos eventos corporativos que "también aportan mucho al museo".

Ha recordado que la exposición de Hopper está contando con una media de 3.500 visitantes diarios y ha destacado que en las grandes muestras expositivas "el público reacciona igual que antes de la crisis", como se demostró el año pasado con la exposición de Antonio López.

"A pesar de la crisis, se puede sobrevivir con el ritmo de crucero que llevamos", ha dicho Solana, quien ha recordado que el museo ya limitó el número de exposiciones hace tiempo a tres grandes muestras al año y actualmente busca proyectos en cooperación con otros museos o centros de arte nacionales e internacionales.

El affaire La Esclusa

En relación con la polémica venta en subasta pública del cuadro La esclusa por parte de la baronesa Carmen Cervera, el director artístico del museo recordó que, aunque "triste" para la propia coleccionista, la venta es "irreprochable" desde del punto de vista legal.

Ha puesto de manifiesto que la baronesa es la propietaria del cuadro y ha recordado que el museo cuenta con una colección "enteramente pública", integrada por 740 cuadros vendidos por el barón Thyssen al Estado en 1993, que "nadie va a enajenar nunca ni corren ningún riesgo".

Además, ha recordado que el museo cuenta con un depósito gratuito, "por el que no recibe ninguna compensación", por parte de la baronesa. "Los cuadros son suyos, podría llevárselos en cualquier momento", y ha puntualizado que ese acuerdo de depósito con el Estado le permite vender un diez por ciento de su colección.

"Me consta que la baronesa ha hecho todos los esfuerzos para aplazar esta decisión y finalmente no ha tenido otro remedio, porque el Estado español no estaba en la mejor situación para hacerle una oferta", ha señalado, aunque ha puntualizado que la propia baronesa ha señalado que no tiene previsto vender ningún otro cuadro, "pero dependerá de su situación y de su voluntad".

Según Solana, pese a lo señalado por la hija del barón, "la única propietaria es la baronesa, y ningún miembro de la familia Thyssen posee ningún derecho de veto sobre las propiedades de Carmen Cervera".No obstante, reiteró que la colección procedente del barón es "tan inajenable como la del Prado o la del Reina Sofía; pertenece a todos los españoles y nadie la va a enajenar".

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