La película Pleasure fue una de las sorpresas de las pasadas ediciones del Festival de Cannes y del Festival de Sundance. Su directora, la sueca Ninja Thyberg, sabía que aquella cinta, fruto de una larga investigación, podría tener obstáculos para ser proyectada en otras partes del mundo, como algunos países de Asia o Estados Unidos, e incluso señaló a la prensa que estaría dispuesta a difuminar o borrar algunas escenas para poder exhibir su debut en el cine: una cruda mirada a la industria del cine porno desde una perspectiva valiente, rigurosa y muy directa.
La también debutante Sofia Kappel es la única actriz de esta película, en la que todos sus participantes son miembros reales de la industria del porno. Sin cortapisas ni límites de ningún tipo, Pleasure cuenta la historia de Jessica, una joven que deja atrás su vida en un pueblo sueco para ir a Los Angeles y convertirse en la próxima gran estrella porno, aunque pronto se dará cuenta de que alcanzar su objetivo no está exento de dificultades y obstáculos que en muchos casos menoscaban su dignidad.
La cineasta ha hablado con Vozpópuli de los tabúes de la industria del porno, de los retos y de las dificultades del rodaje de esta película, que observa con los ojos bien abiertos un mundo lleno de sombras y dudas en el que los comportamientos abusivos con la mujer son en muchas ocasiones una constante. El filme llega este viernes a los cines españoles.
El porno es una gran parte de nuestra cultura, la gente consume mucho porno y existe en un mundo paralelo de sombras, por lo que nadie quiere hablar de ello", afirma la directora
Pregunta: ¿Por qué querías invitar al público a conocer lo que ocurre en las tripas de la industria del porno con una actriz como protagonista?
Respuesta: El porno es una gran parte de nuestra cultura, la gente consume mucho porno y existe en un mundo paralelo de sombras, por lo que nadie quiere hablar de ello. Quería una protagonista femenina porque el porno siempre se narra desde una perspectiva masculina, así que quería revertir la mirada y ver al hombre que hay detrás de la cámara. Por eso vemos este mundo desde los ojos de una mujer.
P: El consumo de porno acapara un porcentaje muy alto del tráfico en internet y, sin embargo, no se habla y en la actualidad es un tabú. ¿Has encontrado respuesta después de hacer esta película?
R: El sexo es un tabú en nuestra cultura, siempre ha sido así en los tiempos modernos. Creo que otra razón es que cualquiera que ve porno tiene claro que no habla sobre igualdad, sino sobre la dominación masculina que se ejerce sobre la mujer, y la mujer se representa siempre como un objeto sexual.
P: ¿Crees que tomar esta perspectiva femenina podría ser útil para ver el porno sin sexismo, o en cualquier caso el porno siempre tendrá una mirada inevitable masculina?
R: Depende de cómo lo hagas. Hay mucho porno feminista también, que viene de gente que realmente está haciendo un esfuerzo por cambiar las cosas. Y aunque la mayoría de las ocasiones está hecho para el espectador masculino, esto no significa que no pueda cambiar. En el futuro creo que lo hará.
P: Esta película es fruto de una larga investigación. ¿Cómo has llegado hasta aquí?
R. He trabajado en la película durante seis años y he dedicado cinco a la investigación. Aunque esta es mi primera película, rodé un cortometraje con el mismo título que se pudo ver en el Festival de Cannes en 2013, y entonces decidí hacer una película. Fui a Los Ángeles para ver todo con mis propios ojos y hacer un retrato justo y preciso.
P: Decidiste contar con actores porno reales. ¿Por qué?
R: No fue una decisión consciente al principio y, de hecho, en el casting contamos con actores. Pero un día nos dimos cuenta de que para ganar credibilidad era mejor contar con intérpretes de la industria del cine de adultos.
Hollywood tiene miedo del sexo. No es algo peligroso y no lo es tampoco mostrarlo, todo depende de cómo lo hagas", destaca la cineasta
P: ¿Crees que la industria del porno ha estado al margen de movimientos como el Me Too?
R: No es así, y de hecho hay un movimiento relacionado, pero no hablan de ello de manera explícita porque están acostumbradas a estar estigmatizadas públicamente, así que son muy cuidadosas con todo para defender su comunidad porno. Pero a un nivel interno, ha habido muchos cambios y eso es un desarrollo positivo.
P: ¿Qué ha sido lo más difícil para Sofía, en esta película tan compleja en la que debuta como actriz?
R: Lo que ella dice es que lo más difícil de la película puede que no fuera lo que los demás piensan, como ocurre con la escena más violenta, que fue preparada de forma muy cuidadosa. Lo más duro para ella fueron otros aspectos, difíciles de defender ante una cámara para una debutante que solo tenía 20 años cuando rodamos. Contactar con sus emociones en las situaciones más exigentes fue lo más complicado para Sofia.
P: ¿Te gusta cómo Hollywood representa el sexo en el cine?
R: La mayoría de las escenas está rodadas desde una perspectiva masculina y aún se centran en la mujer como un objeto sexual, y además Hollywood tiene miedo del sexo. No es algo peligroso y no lo es tampoco mostrarlo, todo depende de cómo lo hagas.