El cantante Joaquín Sabina ha recibido este domingo el alta hospitalaria 11 días después de su ingreso tras caerse del escenario del Wizink Center (Madrid), cuando actuaba junto a Serrat.
Tras el accidente el propio Sabina tranquilizaba al público, sin embargo presentaba "traumatismo de hombro izquierdo, torácico y craeoencefálico" y tuvo que ser intervenido quirúrgicamente de un hematoma intracraneal en el hemisferio derecho, por lo que permaneció seis días en la UCI del Hospital Ruber Internacional.
"Está todo bien"
Joaquín ha estado acompañado en todo momento por sus hijas, Rocío y Carmela, quienes no se han separado de su lado desde el ingreso y le han querido acompañar también en su regreso a casa.
El compositor ha abandonado las instalaciones médicas en coche, no sin antes aclarar que "está todo bien" y agradeciendo el cariño recibido, además planea reencontrarse muy pronto con sus fans sobre los escenarios.
Apoya TU periodismo independiente y crítico
Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación