El pasado martes, un comunicado de Pancho Varona pilló por sorpresa al mundo de la cultura en España. ¿Frase inicial? “Joaquín Sabina ha decidido, contra todo pronóstico, no contar conmigo en su próxima gira”. De manera instantánea, Varona recibió una inmensa corriente de simpatía, con fans compartiendo las especulaciones más disparatadas, desde acusar a Sabina de deslealtad hasta señalar a Leiva como culpable, sin aportar evidencia ninguna (ni siquiera indicios o teorías sólidas). Desde Vozpópuli fuimos los primeros en mostrar escepticismo ante el texto de Varona, menos de dos horas después de publicarse. ¿Cómo podía decir “contra todo pronóstico”? “En ambientes musicales se llevaba tiempo hablando del deterioro de la relación entre el guitarrista y Sabina, así como de las tensiones entre Varona y Antonio García de Diego, otra de las piezas claves del grupo, que sí continúa. De hecho, Sabina apoyó a la banda de versiones sabineras de De Diego cuando se descolgó Varona”.
Otro factor de alejamiento fue la fusión con la banda de Serrat para realizar giras conjuntas, debido a que el músico catalán es muy exigente con el nivel de interpretación y prefería a sus habituales antes que a Varona. Esto es algo que ya había comentado el guitarrista excluido en su cuenta de Twitter. "Tampoco grabé el disco La orquesta del Titanic y Joaquín me puso en la dedicatoria 'Para Panchito, que brilló por su ausencia'. Jaja genio!", escribía en redes en primavera de 2017. ¿Contra todo pronóstico? Igual no tanto.
Una amiga de Pancho, sin experiencia en el sector, se hizo cargo de la contratación reemplazando a la manager anterior
El propio Pancho Varona reconocía su exageración la noche del martes en una entrevista con ABC. “Mi primera reacción fue de sorpresa, aunque es cierto que algo me temía. Hacía tiempo que no tenía relación con Joaquín y eso me hacía sospechar”, reconocía. No dice cuánto tiempo, lo cual es revelador. La ruptura, en todo caso, no era tan sorpresiva como él lo había contado. Varona también admitía explícitamente que Sabina se había negado a hacer una aparición con su banda de tributo dos días después de que hubiera accedido a ello con el proyecto de tributo del resto de su banda, donde está su otro guitarrista de casi toda la vida, Antonio García De Diego.
Así lo recordaba Varona: “Que fuese a cantar con Benditos Malditos, y luego no quisiera venir a cantar conmigo después de pedírselo, fue una más de las señales que yo estaba detectando desde hacía unos meses, y que me decían que algo estaba pasando”, admitía. “No sé si Antonio y algún otro miembro de la banda han podido influir en la decisión de Joaquín. De lo que sí estoy seguro es de que Leiva no tiene nada que ver en esto. En las redes hay gente cargando contra él y me parece injusto”, remataba Varona. La madeja empezaba a deshacerse.
El grupo de Sabina y la mánager de la discordia
El artículo definitivo llegó el jueves por la noche, firmado por el periodista Juan Puchades, director de la revista musical Efe Eme y autor de un libro sobre el álbum clásico 19 Días y 500 noches. En su valioso texto se explica claramente el motivo de la ruptura interna del grupo de grupo de Sabina: “Todo se remonta al otoño de 2021, cuando la formación (que hacía conciertos de tributo) tuvo que cambiarse de nombre tras la salida de Pancho, pasando a denominarse Malditos Benditos (Banda Sabinera), mientras que Pancho (además de hacerse con el control de las redes sociales de la formación anterior), llamaba a lo suyo La Banda del Pirata Cojo, que en Twitter se anuncia como ‘La auténtica Gira Sabinera’ (¿?)”. Traducido: Varona provocó una cruda lucha de poder en la banda de Sabina, autoproclámandose auténtico depositario de las esencias del grupo.
Más madera para el fuego de la ruptura: “De lo poco que se conoce de lo sucedido es que es que meses antes se había producido un cambio en la contratación de las Noches Sabineras: una amiga de Pancho, sin experiencia en el sector, se hizo cargo de la contratación reemplazando a la manager anterior. Además, Pancho mantenía en paralelo varios proyectos en directo (siempre alrededor de Sabina y sus canciones: los reflejados Viceversa y sus conciertos en solitario en los que lo mismo podía tocar en un teatro, un bar o en el salón de tu casa por tu cumpleaños) que marcaban la agenda de la banda principal”, escribe Puchades. Todas estas tensiones hicieron que se rompiera la relación de Sabina y sus grupo con Varona, que se marchó por su lado con la nueva y explosiva mánager, Nira Morena (Esther Segarra), cuya imposición fue uno de los motivos de la discordia.
Puchades también pone negro sobre blanco el rumor que circulaba con insistencia en ambientes musicales: “La relación entre Pancho Varona y Joaquín Sabina limitaba estrictamente a las giras, a subirse al escenario. No mantenían más contacto, ninguno extraprofesional, no había visitas a casa de sabina, ni amistosas, ni profesionales”, confirma. Además cualquier fan de Sabina sabe que hace tiempo que la relación creativa entre ambos estaba agotada: en 1999 le sustituyó como productor por Alejo Stivel para su disco más aclamado (19 días y 500 noches) y Varona no producía música de Sabina desde 2009, con Vinagre y Rosas.
El malestar ha sido de tal calibre que Antonio García De Diego, conocido por su tranquilidad y discrección, rompió estos días su silencio para mostrar su posición en Canal Extremadura: “Han pasado muchas cosas. Yo creo que esto viene de hace tiempo. Probablemente Joaquín debía haber tomado esta decisión antes, si la tenía en la cabeza. Por lo que sea, ya no quiere tocar con él y ahora a Pancho lo que le interesa es hacer ruido. Pancho debería estar de rodillas delante de Joaquín dándole gracias. Sin Sabina no sería nada", explicaba
De Diego también confirma en esa charla el malestar dentro de la banda por la autopromoción constante que se hacía Varona como el escudero principal de Sabina. Le describe como “un tipo que se maneja muy bien en las redes” y que además “ha estado llamando a los periódicos” para contar su versión. Varona siempre “ha sabido transmitir con enorme efectividad su idea del binomio Sabina/Varona, una fantasía que en los medios, con la pereza acostumbrada, siempre hemos reflejado”, escribía Puchades. En todo esto que contamos están algunos de los motivos principales de este divorcio que seguramente nunca debió llegar a discutirse en los medios.
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