Cultura

La SGAE liquida su hedge fund de tesorería para pagar derechos a socios

En 2003 se creó el fondo Creación de Cultura en Español, gestionado entonces por Interdin (hoy BPA). El pasado martes se anunció la liquidación del 99,9% del fondo, cuyo patrimonio es de 3,7 millones de euros. La entidad de gestión usará el dinero para hacer frente a sus compromisos con los socios.

Hace diez años, en el año 2003, se registró el hedge fund Creación de Cultura en España, un fondo gestionado entonces por Interdin (hoy lo lleva Banca Privada de Andorra) y cuya participación principal pertenecía a la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE). El pasado martes 16 de julio, de acuerdo con la CNMV, se liquidó el 99,9%. Según la entidad, la necesidad de afrontar el pago de los derechos de autor entre los asociados motivó la decisión.

El fondo, que cerró con un patrimonio de 3,7 millones de euros, fue creado cuando todavía se encontraba al frente de la institución Eduardo Bautista, expresidente de la entidad gestora, quien todavía permanece involucrado en una investigación judicial luego de que el juez Pablo Ruz le imputara por apropiación indebida y delito societario junto a José Luis Rodríguez Neri y otros directivos.

Creación de Cultura en España es un fondo ético, con un perfil de riesgo alto y un objetivo de rentabilidad del Euribor a un año. Según los datos aportados por la CNMV,  el patrimonio del Hedge fund varió entre los 3,5 y 3,7 millones de euros.

Sus inversiones eran realizadas “evitando las actividades relacionadas con la industria armamentística” o aquellas que fuesen en contra de los derechos de autor. “Se trata de esta forma de evitar que la SGAE, defensora a ultranza de los derechos de autor” invirtiese en aquellas actividades que pudiesen “menoscabar los derechos de sus asociados”, según establece en su descripción.

Al momento del cierre, el fondo tenía un patrimonio de 3,7 millones de euros

La Sociedad General de Autores y Editores, que administra la gestión colectiva de los derechos de propiedad intelectual de más de 103.000 socios, registró en 2012 cuentas con pérdidas de 1,8 millones de euros.

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