Nuestro protagonista de hoy, el youtuber sevillano Shauntrack, "Shaun para los amigos" como el mismo dice al arranque de sus videos, se ha convertido en el creador de contenido musical español más conocido de nuestro país. Supera en seguidores, aunque por poco, al también famoso Jaime Altozano, que se popularizó gracias a su análisis de bandas sonoras. Con 3,23 millones de seguidores en Youtube, 56.700 'followers' en Twitch y casi 40.000 escuchas mensuales en Spotify, este creador de contenido sevillano analiza todas y cada una de las pistas de las canciones que proponen su seguidores, además de hacer covers en las que toca todos los instrumentos necesarios para componer la pieza.
Lejos de limitarse a un género en concreto, Shauntrack -su nombre real es desconocido para el gran público- tiene capacidad para analizar desde el disco Motomami de Rosalía hasta una canción de rock latinoamericano de los años 80 y 90. El abanico de posibilidades es absoluto y ahí nace su éxito: es capaz de llegar a cualquier tipo público, sean cuales sean sus gustos precisamente gracias a su gran cultura melódica. Se aleja de sectarismos musicales para tratar de hacer análisis certeros e imparciales. Con esta fórmula, su canal se aproxima ya a las 327 millones de reproducciones totales y ha ganado, según distintas webs de análisis, entre 500.000 y 750.000 euros desde que abrió el canal.
Sus opiniones no se basan en un criterio aleatorio: Shauntrack es maestro de educación musical y músico miltinstrumentista, además de poseer durante unos años su propio estudio de grabación, negocio en el que trabajó con más de 300 artistas, tal y como él mismo relató en uno de sus videos del canal. No le quedó otra que cerrar a consecuencia de la crisis económica que asoló nuestro país en 2008. Tras echar la persiana, pasó a ser empleado de una tienda de instrumentos.
Dejó este trabajo porque no le gustaba estar tan expuesto de cara al público y fue entonces cuando, casi de casualidad, descubrió su futuro profesional. Creó un canal llamado 'Shaunmoto', donde compartió un viaje en moto gracias a una GoPro pegada al casco. Un viaje pensado "para desconectar" de su etapa en la tienda. Calificó como "una sorpresa" lograr 50.000 subscriptores con un contenido sobre una temática que realmente no conocía.
Ahí salió la chispa que trajo todo lo demás. Pensó que si fue capaz de lograr 50.000 subscriptores, con la música podría llegar mucho más lejos. Y la intuición no le falló: ahora, su canal crece a un ritmo de 30.000 'subs' mensuales y su contenido, cada día, recibe entre 150.000 y 350.000 visitas. Todo en menos de cuatro años, ya que Shauntrack creó su canal en febrero de 2018.
Aunque monetiza su canal y ahora mismo no tiene (que se sepa) otra profesión con la que compaginar su labor como creador de contenido, Shauntrack sufre muchas restricciones a la hora de subir sus videos. Algo por lo que se queja habitualmente, ya que la plataforma no permite reproducir más de tres segundos seguidos de ningún tema con derechos de autor, aunque sea, como en su caso, para realizar una labor didáctica. Para sacar rédito económico a sus vídeos, se las ingenia para poder hablar de música escogiendo los tres segundos necesarios para poder desarrollar sus argumentos. De esta forma, esquiva la política de privacidad de Youtube, muy restrictiva, a la hora de ganar dinero, con contenidos protegidos.
Es por esto que muchas veces, opta por analizar estas canciones instrumento en mano, siempre con lenguaje técnico pero accesible para cualquier tipo de usuario. Ese quizá sea el gran secreto de Shauntrack: consigue que su contenido sea ameno como para poder disfrutarlo y al mismo tiempo, didáctico. Además, deja las canciones desgranadas por pistas -guitarra, voz, teclados,...- en Patreon, una plataforma donde sus seguidores pagan una cuota mensual para disfrutar de contenido extra.