Bienestar

Los 5 beneficios nutricionales del apio: desde estimular el adelgazamiento hasta prevenir la ansiedad y la depresión

Esta particular hortaleza tiene múltiples beneficios a nivel cardiovascular y dietético

El apio (cuyo nombre científico es Apium graveolens) es una especie vegetal perteneciente al orden de las umbelíferas, quienes poseen tallos estriados que forman una gruesa penca con hojas acuñadas. Toda la planta tiene un fuerte sabor acre, aunque el blanqueo de los tallos en el cultivo hace que pierdan esas cualidades, adquiriendo entonces un sabor más dulce y el aroma propio que lo convierte en un ingrediente protagonista de ensaladas y sopas y otros platos.

Se trata de una planta que crece de forma espontánea en toda Europa, concretamente en las zonas pantanosas y cercanas al agua. El término 'apio' es de origen celta y hace referencia a su lugar de plantación ('apon', que significa 'agua' en castellano). Pero mucho antes de los celtas, esta particular hortaleza ya formaba parte de la cultura divina de griegos y egipcios, aunque serían los romanos quienes lo potenciaran su consumo en los banquetes funerarios.

No obstante, hasta la Edad Media no se empezó a investigar sobre sus propiedad culinarias y curativas. Fue entonces cuando el apio pasó a ser considerado como uno de esos superalimentos que catalogamos en la actualidad: ingredientes particulares que ofrecen importantes beneficios para la salud. Por ejemplo, aquellos que ayudan a reducir el colesterol, que colaboran en la pérdida de peso o incluso los que mejoran la vista o el deseo sexual, entre otros.

Pero hay muchos más. Este es el caso del apio, un producto natural y sin procesamiento alguno capaz de ayudar a mejorar la salud humana de la manera más sencilla: a través de su consumo.

Los principales beneficios del apio

Sin ser una hortaliza de gran despliegue nutricional, el apio está formado en un 95% por agua. Los otros cinco gramos se reparten en fibra vegetal (1,8), escasas proteínas (1,3), hidratos de carbono (1,3) y gramos de lípidos (0,2) y minerales y vitaminas (0,4). Dentro de este último grupo también se añaden las sustancias antioxidantes y antinflamatorias características. Además, según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, el apio también aporta otros constituyentes como calcio, hierro, magnesio, sodio o potasio.

Más allá de su uso curativo, esta hortaliza también aporta varios beneficios nutricionales. Las cinco virtudes principales son:

  1. Es un moderador del colesterol, especialmente del LDL o colesterol malo. Así lo certifica este estudio iraní en el que se alimentó a un grupo de ratones de laboratorio durante un periodo de tiempo concreto. Aquellos a quienes les administraron apio ofrecieron un disminución del colesterol LDL y HDL.
  2. Ayuda a bajar la presión arterial. Este mismo estudio corrobora un caso puntual: algunas subidas de tensión arteriales que no responden a tratamientos sí que lo hacen con caldo de apio. En concreto, se trata de una muestra de otro estudio aleatorizado.
  3. Previene el síndrome metabólico. Comer apio ayuda también a prevenir la obesidad, el aumento de triglicéridos en sangre y la diabetes tipo 2, entre otras enfermedades. En ello intervienen los antioxidantes, tal y como expone este otro estudio. "Los antioxidantes tienen un papel calve en la disminución del daño oxidativo a la vez que los fitoquímicos del apio disminuyen la actividad proinflamatoria y previenen la inflamación".
  4. Otro estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Nanjing, reveló que el apio fermentado ayuda a prevenir la obesidad en roedores sometidos a una dieta hipercalórica, apuntando así hacia una futura investigación y tratamiento.
  5. Por último, el apio podría ser un aporte eficaz contra la ansiedad y la depresión. Aunque los resultados no son concluyes, este estudio realizado sobre personas con hipertensión desarrollada por la ansiedad y el estrés, promete esta misma hipótesis. El tratamiento en estos individuos con extracto de semilla de apio disminuyó esas sensaciones negativas experimentadas.

Es por ello, que muchos profesionales recomiendan el consumo de apio en, por ejemplo, batidos o zumos. No obstante, se valora positivamente que sea con cantidades pequeñas, como medio vaso (aproximadamente 125 ml) de zumo de apio y en ayunas.

Apoya TU periodismo independiente y crítico

Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación
Salir de ver en versión AMP