España cuenta los minutos para que llegue el cambio de hora. Como ya es habitual, tendrá lugar en la madrugada del sábado 28 al domingo 29 de octubre, concretamente a las 3.00 horas de la madrugada. Cuando el reloj marque esa hora será el momento de retrasar una hora para que vuelva a marcar de nuevo las 2.00 horas, es decir, el famoso "a las 3.00 serán las 2.00".
El cambio de hora se lleva a cabo porque con él se puede aprovechar mucho más las horas de luz en el invierno. Esto sirve para se reduzca el gasto energético y se alinean las jornadas laborales con las del resto de países europeos. Su antecedente está en la Primera Guerra Mundial. Alemania decidió retrasar los relojes para hacer una reducción en el consumo de carbón y fueron varios los países que siguieron su ejemplo.
En nuestro país el cambio de hora de verano se adoptó por primera vez en 1918. Entre las razones para introducir esta medida en el país fueron políticas y económicas tras la escasez de carbón en la Primera Guerra Mundial y para tener un horario similar al de los países vecinos. Sin embargo, esta hora se fue aplicando de manera discontinua por diversos motivos. Primero, por la Guerra Civil y, después, por la Segunda Guerra Mundial.
Se ha hablado en diversas ocasiones sobre el fin del cambio de hora. El Ministerio de Presidencia por ahora tiene publicado el calendario en el BOE que establece esta actualización desde 2022 hasta 2026. Muchos estudios explican que el cambio de hora no tiene un impacto tan grande a nivel económico como se cree, sino que tiene más consecuencias negativas sobre la salud de las personas. Hay que tener presente que no todos lo sufren de la misma manera. Los mayores de 50 años son unos de los que más.
El cambio de hora en los mayores de 50 años
Las mujeres las que más sufren este cambio de hora. Y lo hacen por diversas razones. Una de ellas, los cambios hormonales que se producen en periodos como la menstruación, los embarazos o la menopausia. Esto puede terminar afectando al sueño o al ritmo circadiano. Además, las mujeres suelen tener más sensibilidad emocional, por lo que pueden tener episodios de estrés y ansiedad que pueden aumentar con el cambio de hora.
El cambio de hora afecta de manera muy distinta a cada persona. Las mujeres de 50 años y los niños son lo más sufridos en este aspecto. En cuanto a las mujeres de 50 años pueden llegar a experimentar algunos problemas de sueño, cambio de humor o fatiga. Algunas investigaciones explican que las mujeres de esta edad también pueden ser mucho más sensible a cambios en el ritmo circadiano. También puede aumentar el riesgo a tener problemas de salud como diabetes o enfermedades cardiovasculares.
Por este motivo, y para minimizar cualquier efecto que puede tener el cambio de hora en la salud de las mujeres que son mayores de 50 años, se recomienda que sigan una rutina de actividad física y sueño, una alimentación que sea saludable reduciendo el consumo de cafeína o de alcohol. También es importante evitar una exposición continuada a los dispositivo electrónicos antes de ir a dormir.
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