Nutrición

Dieta 'realfooding': los alimentos 'reales' que te ayudan a adelgazar

El movimiento 'realfooding' promueve una alimentación saludable en la que queden fuera de la dieta los productos procesados o ultraprocesados

El 'realfooding' es un movimiento que promueve la alimentación saludable y que en los últimos años ha dado mucho que hablar, ya que seguir este tipo de rutina de alimentación ayuda a sentirse mejor por dentro y en muchos casos también a adelgazar.

La idea de mantener una alimentación saludable no es de ahora. Uno de los primeros en hablar de la dieta 'realfooding' fue el doctor Weston A. Price, el cual centró su investigación en las deficiencias nutricionales y cómo estas producían una apariencia física en deterioro frente a otra población que gozaba de una buena alimentación

Gracias a los estudios de este doctor, fue Carlos Ríos, dietista y nutricionista, el que impulsó este movimiento a partir del año 2013. De esta manera, el consumo de alimentos naturales es elegido entre aquellos que deciden seguir este estilo de vida, evitando al máximo posible aquellos alimentos que hayan sido procesados.

Pero son muchos los estudios que han demostrado que la ingesta de alimentos procesados y ultraprocesados no son buenos para la salud en general, ya que contienen altas cantidades de azúcar refinada y carbohidratos, aceites hidrogenados y grasas trans, que no son buenos para nuestro organismo.

Según explica la Organización Mundial de la Salud, los procesados son “aquellos productos alterados por la adición o introducción de sustancias (sal, azúcar, aceite, preservantes y/o aditivos) que cambian la naturaleza de los alimentos originales, con el fin de prolongar su duración, hacerlos más agradables o atractivos”.

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La dieta realfooding promueve los alimentos frescos y no procesados.Pixabay

Si se come habitualmente este tipo de productos, puede llevar a la persona a padecer enfermedades como la obesidad, la diabetes, los trastornos digestivos, alergias e intolerancias alimentarias o colesterol alto, entre otras.

Además de apostar por la alimentación saludable y por un estilo de vida más sano (recuerda que el ejercicio físico también es fundamental para llevar a cabo ese estilo de vida saludable), las personas que siguen la dieta 'realfooding' se preocupan mucho por el impacto medioambiental. Si se evita el consumo de alimentos procesados se reduce también la huella de carbono y se contribuye a una protección de nuestro planeta. 

Beneficios del 'realfooding'

Entre los beneficios que se otorgan a este tipo de alimentación se encuentran desde sentirse menos hinchado después de haber comido y unas mejores y más ligeras digestiones; un control del apetito; un mejor descanso y mejor estado de la piel o el cabello; prevención de algunas enfermedades víricas al fortalecer el sistema inmunitario; y una mayor energía física y mental para afrontar el día a día.

Alimentos de 'realfooding'

Seguir una dieta 'realfooding' para perder peso o sencillamente para sentirte mejor por dentro no quiere decir que tengas que eliminar de tu dieta diaria ni los hidratos de carbono ni las grasas saludables. Pero sí es cierto que esta alimentación se basa en consumir más frutas, verduras, carne sin procesar... Todo está permitido para un 'realfooder', siempre y cuando haya sido ‘producido’ de forma casera, sin industrias de por medio. Los alimentos que se pueden comer serían: 

  • Frutas y verduras frescas.
  • Productos lácteos frescos como leche, yogur sin azúcar, huevos y queso.
  • Trigo y otros cereales integrales.
  • Arroz integral.
  • Verduras secas.
  • Pan y dulces hechos a mano.
  • Pizzas y pastas caseras.
  • Mariscos.
  • Carnes producidas de manera local.
  • Café y té (sin azúcar, sino endulzado naturalmente).
  • Vino y cerveza (si es de destilación artesanal, mejor)
  • Endulzantes totalmente naturales como miel, jarabe de arce o ágave.
  • Especias para darle sabor a tus platos como el curry o el comino, entre otras. 

Por el contrario, los alimentos que deberían quedar reducidos al máximo en la dieta realfooding son: 

  • Comida rápida.
  • Bebidas carbonatadas o energéticas.
  • Zumos y batidos que no son naturales.
  • Platos precocinados.
  • Patatas fritas o cualquier otro snack en bolsa.
  • Frutas y verduras congeladas o enlatadas.
  • Carnes y pescados procesados ​​(nuggets, hot dogs, palitos de cangrejo).
  • Arroz, cereales y harinas refinadas.
  • Conservas (excepto conservas naturales y caseras).
  • Azúcar.
  • Endulzantes artificiales como Stevia o sacarina.
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Las legumbres forman parte de la dieta realfooding.Pixabay

Cómo iniciarte en el realfooding

Según explican en su web, hay tres conceptos clave para iniciarse en la dieta reafooding. El primero sería “priorizar la comida vegetal real”; el segundo sería “complementar con buenos procesados”, y el tercero sería “evitar los ultraprocesados”. Para aquellos que quieren comenzar a seguir este tipo de alimentación, lo primero es evitar los alimentos ultraprocesados siempre que se pueda. 

Un buen truco es no tener este tipo de alimentos en casa aunque a veces, por ejemplo en algunos eventos o fiestas, sea inevitable su consumo. Si lo que compras tiene más de cinco de ingredientes y muchos no los conoces, es mejor no comprarlo. Lee con calma las etiquetas y así sabrás qué es bueno para tu organismo y qué es mejor no tener en la nevera de casa.

Planifica tus comidas semanales para no caer en la tentación de ir a un restaurante de comida rápida. Compra fruta y verdura, innova con tus platos y prueba nuevos alimentos para añadir a tu dieta del día a día. Otro buen consejo es comprar alimentos frescos en mercados locales o ecológicos. Apuesta por productos de temporada y que estén libres de pesticidas y químicos. También cuando hablamos de la carne o el pescado es mejor que sea ecológica, así como los huevos, que sean de gallinas camperas criadas en libertad.

Algo parecido sucede con el pan. Es mejor comprarlo en panaderías locales o más tradicionales que no incluyan conservantes o harina refinada. Si hablamos de pastas, cocina tú la pasta, prepara la salsa con alimentos frescos y mejor no uses salsas ya preparadas. Elige la versión integral de la pasta, el arroz o las galletas. 

Si eres de los que no se puede resistir a una pizza o a unas patatas fritas, no te preocupes, puedes prepararlas tú mismo y dejar a un lado las que ya vienen precocinadas para seguir el 'realfooding'. Haz pizza casera (¿has probado la versión con masa de coliflor? Exquisita y muy saludable), cocina las patatas al horno, puedes optar por batata cortada en tiras y hacerla al horno.

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