Estos son los seis hábitos innegociables para un diabético si quiere controlar el azúcar en sangre

La diabetes es una enfermedad que en los últimos años ha crecido alarmantemente. Desde 2019 se ha incrementado un 41%, y ha alcanzado los cinco millones de afectados. Pero, ¿qué es exactamente la diabetes? Se trata de una patología metabólica crónica que se caracteriza por altos niveles de azúcar en sangre, que puede conducir a problemas de salud más graves. Por ello, es importante tratar de prevenirla con antelación, y adoptar hábitos saludables para evitar su llegada.

Con el avance de la enfermedad, sus consecuencias pueden ser muy distintas, ya que son varios los tipos y su forma de afectar a la salud. Algunos de ellos son graves daños en el corazón y vasos sanguíneos, problemas cardiacos, además de en los ojos, riñones y nervios. Así, 6 hábitos pueden combatir su llegada según los profesionales de la salud.

Los seis hábitos que previenen la diabetes

Se desconocen las causas exactas de la aparición de la enfermedad, y por ello el tratamiento es sencillo: dieta, ejercicio físico y la medición constante del azúcar en sangre. Esta misma línea es la que siguen los seis hábitos para prevenir la diabetes, algo de vital importancia ya que, una vez la patología es diagnosticada, no tiene cura.

• Dieta equilibrada. Este es uno de los pilares fundamentales para controlar el azúcar en sangre. Los alimentos ricos en proteínas, grasas saludables y fibra -muy recomendable ya que absorbe el azúcar- son ideales, mientras que es recomendable evitar alimentos ricos en azúcares y grasas saturadas, como la bollería industrial o la mayor parte de alimentos precocinados.
• Ejercicio regular. Adecuar la rutina de actividad física a cada tipo de cuerpo, edad y patologías es vital. Consultar a un profesional -al igual que al cuidar la dieta- es clave: según estos, caminar 30 minutos al día es el mínimo para mantener un buen estado de salud. De la misma manera, tiene todo tipo de beneficios, como retrasar los problemas de huesos, problema que se ve incrementado entre las mujeres con la llegada de la menopausia.

• Mantener un peso saludable. Seguir una dieta equilibrada y tener el hábito de hacer ejercicio lleva a mantener un peso saludable, todo va encadenado, aunque siempre hay excepciones. La constitución u otro tipo de problemas de salud, como aquellos que afectan al tiroides, pueden hacer que cueste más alcanzar los resultados deseados. Todos estos procesos deben hacerse acompañados por médicos y profesionales de la salud.
• Descansa adecuadamente. Con el ritmo frenético del día a día, en muchos casos se sacrifica el descanso para 'tratar de llegar a todo'. Pero lo cierto es que descansar es clave para mantener una buena salud. Numerosos estudios afirman que no dormir las horas adecuadas durante tiempos prolongados aceleran la llegada de problemas como la demencia, y aceleran el deterioro cognitivo.
• Una buena hidratación. Está demostrado que la deshidratación puede llevar a los diabéticos a sufrir picos de azúcar en sangre. Los profesionales de la salud advierten que los hombres necesitan beber una mayor cantidad de agua que las mujeres: en el caso de ellos, más de 3 litros. Aún así, comer alimentos ricos en agua -como el melón o la sandía- es clave para alcanzar estos niveles sin demasiado esfuerzo.
• Evita el estrés. Finalmente, tratar de llevar una vida más relajada también es favorable para evitar la llegada de la diabetes. Está demostrado que la actividad física contribuye en este aspecto, al igual que dedicar cierto tiempo del día a cuidarse y mimarse. Sacar media hora para disfrutar de tu serie favorita, dedicar unos minutos a meditar y hacer estiramientos, o hacer la actividad que más te gusta, pueden ser algunos ejemplos para reducir el estrés.

Los profesionales siempre advierten de ello: es mejor prevenir que curar. Ser conscientes de los peligros de la diabetes y de la importancia de regular el azúcar en sangre antes de que sea un problema es ideal para evitar el diagnóstico de la enfermedad.