Arda Turan, futbolista turco del FC Barcelona entre 2015 y 2017, que fue fichado procedente del Atlético de Madrid y ahora es entrenador del Eyüpspor de Turquía, habría destrozado la casa de Esplugues de Llobregat donde se alojó en su etapa en el club azulgrana. Una casa valorada en 18 millones de euros y en la que ocasionó desperfectos valorados nada más y nada menos que en 230.000 euros.
"Termina de firmar el contrato y se pone a gritar como un loco: "‘¡Visca el Barça!, ¡Barça!, ¡Barça!’", comenta el casero de la casa en 'El Periódico de España'.
El propietario de esta lujosa casa de la Ciudad Condal ha desglosado todos los gastos que ha tenido que llevar a cabo en los últimos años desde que Arda Turan dejó el Barça. Hicieron falta 16.500 euros para restaurar las puertas, 23.000 para revitalizar un jardín en el que había incluso un árbol talado, 64.300 para la cocina o 24.500 euros para volver a poner en marcha la domótica y los sistemas electrónicos del chalet. Solo en luces, limpieza y desperfectos varios hay facturas por valor de 84.000 euros.
Según recuerda el dueño, Arda Turan era una persona que, en principio, estaba preocupada por la limpieza, pues lo primero que habría hecho antes de entrar a vivir en su chalet fue encargar una desinfección que eliminase los restos biológicos de los anteriores inquilinos "no musulmanes". Su forma de tratar la casa, a partir de ahí, cambió. "Cuando Arda y quienes le acompañaban estaban viendo el fútbol y se marcaba un gol, dependiendo de quién fuera, tiraban el mando de la televisión a la piscina. ¡Un mando de mil euros! Y creo que llegó a tirar como diez o quince. Es síntoma de no estar en el mundo. Dejaron quemaduras de cigarrillo...".
La vivienda, valorada entonces en unos 18 millones de euros y ubicada en Esplugues de Llobregat, contaría, con siete dormitorios, nueve baños, un salón de 100 metros cuadrados, una sala de cine insonorizada, una habitación de golf virtual, un garaje con capacidad para ocho coches y una piscina 'infinity' con vistas a Barcelona.
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