El Athletic Club se clasificó este jueves para las semifinales de la Copa del Rey después de tumbar al Real Madrid por la mínima (1-0) gracias a un gol de Álex Berenguer cuando tan solo restaba un minuto de juego, en un partido áspero que estaba destinado a la prórroga. Los de Marcelino García Toral no se cansan de firmar victorias para el recuerdo ante su afición. Este jueves tocó el Madrid, el mejor equipo del momento e intocable en sus 'cara a cara' de este año, y hace dos semanas fue el Barça a quien bajaron del tren. Los dos grandes del fútbol nacional han sucumbido al empuje de San Mamés y sus leones.
La noche tardó muy poco en enviar señales con Dani García disparando hasta sus botas mientras el Real Madrid achicaba agua de su área casi por inercia. De hecho, el primer tiro a puerta de los blancos fue un disparo manso de Rodrygo al borde de la media hora. La ausencia de Karim Benzema fue un lastre demasiado grande para los de Ancelotti, que se perdieron en los metros finales.
Para colmo, la acumulación de partidos de sus jugadores brasileños impidió ver la mejor versión de Casemiro -errático como nunca- y de Vinicius, sin la chispa habitual en los metros finales. El partido se puso bronco y Nico Williams, con su desborde imparable, terminó de hacer daño a los merengues por el costado diestro. Su lesión al descanso fue una mala noticia para los locales.
Sin embargo, el Athletic se repuso pronto del golpe y -a los cinco minutos de la reanudación- Raúl García remató solo en el área pequeña a escasos centímetros de la portería defendida de Courtois, que jugó su primer partido de Copa en lugar de Lunin, el elegido hasta ahora para el torneo del K.O. A partir de la hora, todo cambió, y en los diez minutos finales fue el Real Madrid quien controló el duelo.
La gran ocasión de los madridistas estuvo en botas de Casemiro, que remató sin fuerza una gran combinación forjada con un taconazo de Asensio a los 80 minutos. Ese perdón, dentro del área y casi sin oposición, le costó caro a los de Ancelotti, que siguen peleados con la Copa del Rey. Desde 2014 no la ganan, precisamente con el italiano en el banquillo en su primera etapa.
Álex Berenguer, culpable de los males del Real
El culpable de los males del Real Madrid fue Álex Berenguer, que marcó el único tanto del choque con un quiebro maestro -asistido por Vesga, uno de los mejores este jueves- y fusilar al palo largo haciendo inútil la estirada de Courtois. Un golazo de bandera que levantó a San Mamés de su asiento.
Isco lo intentó en el tiempo de descuento con una volea que se fue desviada y el Madrid murió, como de costumbre, sin alcanzar la final de un título al que no presta demasiada atención. El Athletic, por contra, después de tres derrotas este año con los de la capital, demostró su corazón copero y certificó su presencia entre los cuatro mejores