Dos son los objetivos prioritarios del Athletic para reforzar su equipo tras la marcha de Javi Martínez y reinvertir parte de los 40 millones que el Bayern de Múnich ha pagado por el navarro. El lateral izquierdo del Málaga, el internacional Nacho Monreal, y el centrocampista del Atlético de Madrid, Raúl García. Sin embargo, ninguna de las dos operaciones están resultados sencillas para el club que preside Josu Urrutia y, de hecho, la segunda ya está descartada unilateralmente.
En el caso de Monreal, el Málaga es el primer escollo, pues el club andaluz no está por la labor de desprenderse de él una vez que se ha clasificado para disputar la Liga de Campeones y su situación económica se ha estabilizado. Además, la oferta que el Athletic le ha hecho llegar al jugador no le satisface, pues es inferior a lo que cobra en el Málaga.
En el caso de Raúl García las circunstancias son diferentes. El centrocampista navarro estuvo cedido el curso pasado en el equipo del que fue fichado por el Atlético, Osasuna, con el que marcó 11 goles. De vuelta al Calderón, parece que Simeone contará con él, aunque no como titular, de ahí que su salida sería negociable. Su cláusula es de 36 millones y, según algunas informaciones, tiene una ficha que ronda los 1'8 millones por temporada. Raúl García acaba contrato en 2015, y si algo tiene claro es que no quiere fichar por el Athletic. Prueba de ello es que el navarro ha dado calabazas a la oferta que Urrutia ha hecho llegar a sus agentes, curiosamente los mismos de Monreal... y de Javi Martínez.
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