El Atlético de Madrid se proclamó campeón de la Copa de la Reina por segunda vez en su historia después de derrotar en la final celebrada en el Estadio de Butarque de Leganés al Real Madrid tras una tanda de penaltis y después de ser capaz de igualar un 2-0 cuando perdía en el minuto 88.
El conjunto madridista ya tenía agarrada de un asa el trofeo. Dos cabezazos a balón parado le habían dado ventaja, pero fue demasiado conservador en el tramo final y el colchonero demostró su carácter competitivo. Esta vez, el tiempo añadido le fue favorable al rojiblanco, capaz de igualar, resistir la prórroga y llevarse el premio en unos penaltis donde su rival falló tres lanzamientos para quedarse sin el primer título.
Comenzó la final fuerte el Real Madrid, cuya presión ahogó de inicio a su rival. Sin embargo, este fue asentándose y logró llevar el encuentro a su terreno y siendo el que más sensación de peligro llevó hacia el área de Misa Rodríguez, que tuvo más trabajo que Lola Gallardo.
Ajibade, un auténtico 'tormento' para Kenti Robles, dio el primer aviso con un cabezazo en un saque de esquina y poco después la portera canaria metió su primera buena mano a un disparo en el corazón del área Banini. El Atlético empezaba a hacer el partido suyo, en buena parte por su capacidad para evitar que Caroline Weir y Claudia Zornoza pudiesen entrar en contacto con el balón.
Feller era un poco islote en punta, Athenea del Castillo no estaba excesivamente fina y Linda Caicedo amenazaba, pero de forma intermitente. Sin embargo, el Real Madrid fue el que encontró la ventaja en un saque de esquina que, según indicaron las imágenes de televisión, podría no haberle sido favorable. Toletti, imperial, cabeceó cruzado a la red y puso el 1-0 a la media hora.
El conjunto de Óscar Cano acusó el golpe. Con más espacios, el de Alberto Toril le amenazó con un par de contragolpes siempre bajo la batuta de la calidad de Weir, pero los compases finales fueron más rojiblancos con Misa Rodríguez mostrando de nuevo su colocación ante otro disparo peligroso de Ajibade.
El Madrid acaricia la Copa
La salida de vestuarios tras el descanso trajo de nuevo el mejor inicio madridista, ante el que esta vez no tuvo respuesta el conjunto colchonero, que se vio sin poder salir y viendo como la Copa se le ponía cara. Lola Gallardo le metió una mano espectacular a Weir, pero no pudo hacer nada minutos después ante otro cabezazo tras un saque de esquina, esta vez de la capitana Ivana Andrés en el segundo palo.
El Atlético, frío como el ambiente por la irrupción de la lluvia en forma de tromba, ya no encontraba a Ajibade ni la forma de salir y Óscar Cano trató de reaccionar con un triple cambio (Irene Guerrero, Eva Navarro y Lucía Moral) en busca del gol que les devolviese las opciones, pero no funcionó porque el subcampeón de la Liga F controló bien la situación.
Toril metió más posesión con Maite Oroz por una Del Castillo muy activa en la segunda mitad. El Real Madrid dio un paso atrás, y aunque pudo sentenciar tras un error en la salida de Menayo que, extrañamente, no aprovechó Weir, lo pagó caro por culpa de Banini. La argentina firmó una gran jugada para que Lucía Moral recortase en el 88 y luego fue capaz en el arreón final de llevar en el añadido el partido a la prórroga con una sensacional falta. En la media hora extra apenas pasaron cosas y los penaltis sonrieron al Atlético.
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