La atleta jamaicana Elaine Thompson ha revalidado su título de campeona olímpica de los 100 metros femenino en Tokio, al imponerse este sábado en la final, con récord de los Juegos Olímpicos y con una marca que la convierte en la segunda mujer más rápida de la historia, por delante de sus compatriotas Shelly-Ann Fraser-Pryce y Shericka Jackson.
Thompson, que acudía a la cita olímpica como campeona defensora en los 100 y los 200 metros, mostró su poderío en una prueba en la que paró el crono en 10,61, una marca que le permite establecer un nuevo récord olímpico y que a nivel mundial solo se queda por detrás de los 10,49 de la estadounidense Florence Griffith-Joyner en 1988.
Con ello, conquista el cuarto oro consecutivo en la prueba para Jamaica, que ha copado todas las posiciones del podio. Shelly-Ann Fraser, que aspiraba a su tercer título olímpico tras ser campeona en Pekín 2008 y Londres 2012, tuvo que conformarse con la medalla de plata, que mejora el bronce de Río. Shericka Jackson, por su parte, estrenó su palmarés en Juegos con un bronce.
Mientras, en las series de los 100 metros masculinos, inmersos ya en la era 'post Usain Bolt', el canadiense Andre de Grasse, plata en el 200 y bronce en 100 metros en Río 2016, marcó el mejor tiempo de las series (9,91), igualando la mejor marca del año. El italiano Marcell Jacobs, que estableció el récord de su país con un sorprendente 9,94, y el estadounidense Fred Kerley (9,97) coparon el podio de la tabla de tiempos.
Mientras, otro de los grandes favoritos, el jamaicano Yohan Blake (10,06), plata en Londres, terminó segundo en su serie por detrás del australiano Rohan Browning (10,01), suficiente para avanzar a las semifinales.
