La Ultimate Fighting Championship (UFC) es una religión para los amantes de los deportes de contacto en los Estados Unidos. Recién vendida a lo grande por cuatro mil millones de dólares tras ser adquirida en su día por la mitad, la empresa WME-IMG ha desembarcado con ambición en la niña bonita de lucha mundial.
Allí, en el escenario en el que cualquier luchador de MMA (Artes Marciales Mixtas) quiere pelear, debutó en el cartel de un evento principal el español Enrique 'Wasabi' Marín. Sevillano de nacimiento, este pionero (la única ligazón de nuestro país con la UFC era por ser lugar de entrenamiento durante mucho tiempo del campeón brasileño Fabrício Werdum) se armó de ganas y sudó en los entrenamientos para estar a la altura del cartel del UFC 200 en el T-Mobile de Las Vegas, compartiendo cita ese día con verdaderos ídolos como el californiano de origen mexicano Caín Velásquez, el ex WWE Brock Lesnar o el brasileño José Aldo.
'Wasabi', de 29 años, pese a que venía de perder ante Erick Montaño en la final del TUF latinoamericano, fue una magnífica prueba para un Sage Northcutt teóricamente superior. Además, el combate se fijó en el peso ligero (155 libras), por lo que Marín tuvo que bajar unos kilos desde el peso welter (170 libras), su categoría habitual.
Con todo, su desempeño ante los ojos del mundo (más de 18.000 personas en el público y cifra récord de casi once millones de dólares recaudación en el pay-per-view) fue extraordinario. El primer round fue para el jovencísimo Northcutt, un prodigio físico que mostró su conocida pegada. Pero 'Wasabi', especializado en jiu-jitsu y kickboxing, se sacudió los nervios y llegó a derribar al local en el segundo. El tercero, un round de poder a poder, cayó del lado yanqui mientras el andaluz seguía tratando de volver a derribar a su adversario para intentar ganar vía sumisión.
Al final, una sorprendente decisión unánime que fue criticada por los expertos, que vieron mérito en el desempeño del español. Profesor de primaria con especialización en educación física, 'Wasabi' (apodo que le viene por su afición a la comida y cultura japonesas) volverá a un evento principal de la UFC. Seguro. La industria más importante del mundo de la lucha sabe que tiene en él a un valor seguro.
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