El fútbol mundial se viste de luto. Leo Beenhakker, uno de los entrenadores más icónicos de las décadas de los 80 y 90, ha fallecido este jueves a los 82 años. Apodado 'Don Leo', Beenhakker llevó al Real Madrid a conquistar tres títulos de Liga consecutivos entre 1986 y 1989, además de una Copa del Rey y una Supercopa de España. Su muerte se produce tras varios meses de deterioro en su estado de salud, que ya había encendido las alarmas en Países Bajos.
Nacido en Róterdam el 2 de agosto de 1942, Beenhakker inició su andadura en el fútbol español dirigiendo al Zaragoza (1981-1984), antes de alcanzar la gloria en el banquillo blanco. En el Real Madrid sucedió a Luis Molowny y comandó una generación inolvidable, la de la 'Quinta del Buitre', hasta llevarla a encadenar un histórico triplete de Ligas. Bajo su mando, el club también sumó una Copa y una Supercopa, aunque se le resistió la ansiada Copa de Europa, cuyo gran golpe fue la dolorosa derrota 5-0 ante el Milan en San Siro en 1989.
Beenhakker también es recordado por sus éxitos en su país natal, donde tiene el honor de ser el único entrenador que ganó la Eredivisie tanto con el Ajax (1979-80 y 1989-90) como con el Feyenoord (1998-99). Su carrera internacional incluye, además, el liderazgo de selecciones nacionales como la de Países Bajos en el Mundial de Italia 1990, Arabia Saudí, Trinidad y Tobago y Polonia, a la que clasificó por primera vez en su historia para una Eurocopa en 2008.
Deterioro en su estado de salud
En los últimos meses, su estado de salud preocupaba seriamente a su entorno. Amigos cercanos como el agente Rob Jansen y el exfutbolista René van der Gijp habían revelado que Beenhakker apenas salía de casa y atravesaba una situación "muy, muy difícil". "Hablo con él de vez en cuando. A veces está de buen humor, pero todos estamos muy preocupados", confesaba Jansen recientemente.
El Real Madrid fue una de las primeras instituciones en lamentar públicamente su pérdida. En un comunicado oficial, el club expresó "sus condolencias y su cariño a sus familiares, a sus clubes y a todos sus seres queridos", recordando a Beenhakker como "un histórico entrenador que formó parte fundamental de nuestra historia".
