El presidente de la FIFA, Joseph S. Blatter, ha confesado que no entra en sus "competencias llamar a rendir cuentas" al ex presidente Joao Havelange, después de que se conociese oficialmente que éste y Ricardo Teixeira, ex presidente de la Confederación Brasileña, aceptaron sobornos multimillonarios en el caso de la empresa ISL. "No está dentro de mis competencias llamarlo a rendir cuentas. El Congreso le nombró presidente honorario y sólo el congreso podrá decidir sobre su futuro", señaló Blatter en una entrevista exclusiva a FIFA.com, sobre quien sigue siendo presidente honorario, Joao Havelange.
"El Congreso le nombró presidente honorario y sólo el congreso podrá decidir sobre su futuro"
El pasado mes de diciembre, un tribunal suizo, concretamente la Corte Suprema del cantón de Zug, ordenó a la Federación Internacional de Fútbol la entrega de los documentos relacionados con la quiebra de la empresa ISL, exsocio de la entidad que rige el fútbol mundial. Ahora, la resolución judicial hecha pública el 11 de julio por el tribunal federal suizo permite consultar el auto de archivo del caso. "El tribunal federal suizo decidió anonimizar la publicación del auto de sobreseimiento del caso ISL. Por mi parte, todo el documento podría haber sido publicado 'limpio' para poner fin, de una vez por todas, a las conjeturas. Con todo, el tribunal federal constata que se mantendrán en el anonimato 'los nombres de terceros no acusados'. Yo no he sido acusado y, por tanto, permanezco de forma anónima como 'P1', lo cual, para ser sincero, no es difícil de adivinar", apuntó Blatter sobre el auto.
"Yo no he sido acusado y, por tanto, permanezco de forma anónima como", añade el presidente de la FIFA
Así las cosas, Blatter insistió en su inocencia sobre lo que entendió el tribunal como "gestión desleal" de la FIFA, "apropiación indebida y eventualmente gestión desleal" de Havelange y Teixeira. "En ese entonces tales pagos podían descontarse como gastos de la empresa e incluso de los impuestos. En la actualidad sería sancionable. El pasado no puede medirse con los patrones actuales, si no, acabaría siendo un juicio de índole moral. De modo que no pude haberme enterado de un delito que no era tal", aseguró.
"El pasado no puede medirse con los patrones actuales, si no, acabaría siendo un juicio de índole moral"
Por último, el máximo dirigente del fútbol mundial recordó que la FIFA ya creó organismos que controlen e impidan casos como este, que plantean una cuestión ética más allá de lo jurídico. "Precisamente para evitar que algo así suceda en el futuro. La Comisión de Ética se creó por una iniciativa que lancé en 2006 a consecuencia del caso ISL. Las reformas encaminadas apuntan en esta dirección", afirmó. "Para reforzar la justicia en las federaciones, se han adoptado ya medidas importantes con la creación de un sistema de dos órganos, uno de instrucción y otro de decisión. La próxima semana, el Comité Ejecutivo procederá al nombramiento de los presidentes de estos órganos", finalizó.