Corría el minuto 53 de partido cuando Antoine Griezmann culminó una contra anotando el gol de los rojiblancos. Segundos después comenzaron a aflorar los gritos de "¡Florentino, dimisión!" en diversos puntos del estadio Santiago Bernabéu. La afición se giraba al palco, señalando al presidente por la dinámica de malos resultados que ya suma dos temporadas.
En ningún momento hubo reproches para Zinedine Zidane, el técnico del Real Madrid. Ni siquiera para los jugadores, con excepción para James, quien al ser sustituido por Lucas Vázquez en el minuto 57, era pitado por la grada. El colombiano está en el ojo del huracán por su enfrentamiento con Rafa Benítez y su mal estado físico y de juego.
Precisamente hoy se cumplen 10 años de la marcha de Florentino Pérez del club. El 27 de febrero de 2006, tras la estrepitosa derrota en Mallorca (2-1 y el Barça líder a diez puntos), Florentino convocaba a los medios para anunciar una dimisión que nadie esperaba. "He maleducado a los jugadores", argumentó y se marchó del club, al que regresó tres años después. La afición madridista comenzó a desfilar antes del final de partido, abandonando las gradas con su equipo abajo en el marcador.
Al final del partido un grupo de aficionados espero a los jugadores, a los que increparon al grito de "mercenarios". Especialmente a la salida de Cristiano y Benzema. Además, aficionados denunciaron en las redes que la seguridad del club desalojó a golpes a los madridistas que se quedaron a esperar la salida de Florentino al que increparon y volvieron a pedir su dimisión.
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