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Guillem Pujol y Mireia Belmonte protagonizan con sendas victorias la 115ª Copa Nadal de Barcelona

La emblemática prueba corona al eterno campeón masculino y celebra el triunfo de la medallista olímpica

La Navidad en Barcelona tiene una cita ineludible con la natación: la Copa Nadal. Este 25 de diciembre, la competición más antigua de aguas abiertas en España celebró su 115ª edición en el Port de la Ciudad Condal, reuniendo a grandes figuras del deporte acuático. Entre ellos, Guillem Pujol y Mireia Belmonte, que fueron los grandes protagonistas tras lograr sendas victorias en ambas modalidades.

La cuádruple medallista olímpica Mireia Belmonte, actualmente nadadora del Club Natació Barcelona, cumplió con las expectativas al adjudicarse la victoria en la prueba de 200 metros. La competición, que incluye un recorrido con giro en boya a los 100 metros y salida y llegada frente a la icónica estatua de Cristóbal Colón, fue el escenario perfecto para el regreso triunfal de la deportista catalana. "Siempre he tenido muchas ganas de esta competición, pero el calendario no me cuadraba", confesó Belmonte, tras compartir el primer lugar con su compañera Laura Rodríguez.

El triunfo de Belmonte sigue la línea de su preparación de cara a próximos grandes objetivos, como el Campeonato Mundial de Natación que se celebrará el verano de 2025 en Singapur. La nadadora de Badalona relevó en el palmarés a Jimena Pérez, ganadora de la edición anterior, demostrando que sigue siendo una referencia.

En la categoría masculina, el nombre de Guillem Pujol brilló una vez más, consolidándose como el rey indiscutible de la Copa Nadal. El actual campeón de España en la modalidad de 10 kilómetros cumplió con su papel de favorito al alzarse con su undécima victoria consecutiva desde su debut triunfal en 2014. Este nuevo título le permite desmarcarse como el nadador con más victorias en la historia de la competición, superando el récord que compartía con Daniel Serra.

La rica historia de la Copa Nadal comienza en 1907 con la victoria de Edwald Poeschke y que, tras más de dos décadas, abrió sus puertas a la participación femenina con el triunfo de Maria Lluïsa Vigo en 1928. La edición de este año, como siempre organizada por el Club Natació Barcelona, volvió a reunir a aficionados y deportistas en un ambiente festivo que combina tradición y alta competición.

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