"Estos son mis principios. Si no le gustan tengo otros". Esta frase, atribuida a Groucho Marx, se podría aplicar sin problemas sobre Gerard Piqué tras la publicación de los audios en los que trata distintos temas con Luis Rubiales. El capitán azulgrana ha dejado al desnudo un discurso incongruente, que a menudo ha variado cuando los intereses económicos propios han asomado por la puerta.

Incluso ha dicho frases que han caducado a las pocas horas por su incoherencia. En su defensa en Twitch, Piqué aseguró que "lo único ilegal" del 'Caso Supercopa' era la filtración de los audios... pero no dudó en reenviar uno de Sergio Ramos al presidente de la RFEF: "Rubi, este es un mensaje que me ha enviado Sergio Ramos. Quédatelo para ti. Por favor, que sea confidencial". En el audio, el camero le dijo a Piqué que no quería entrar en la guerra de poderes entre Rubiales y el actual presidente de AFE, David Aganzo. Ahí, el catalán no dudó en infringir la ley -reenviar audios en Whatsapp sin consentimiento está penado por la Ley Oficial de Protección de Datos- para echar un cable a su socio en la Supercopa de España.

En la propia defensa de 'Geri', aseguró que "jamás" iba a "pedir una ayuda de nada". Pero apenas 24 horas después, un nuevo audio personal a Rubiales desvelaba que el central azulgrana le solicitó un favor. "Esta me la tienes que conseguir, me hace una ilusión que te cagas jugar unos JJOO". Piqué pidió que el presidente de la RFEF intercediese por él ante el seleccionador sub-21 para que le llevase a Tokio 2020.

Piqué criticó la Superliga de clubes: "Esto es capitalismo puro y duro". Pero todos estos pensamientos tan contrarios al 'fútbol moderno' dejaron de importar cuando el beneficiario de las comisiones por la organización de un torneo era Kosmos, su empresa

También afirmó que le llamaba 'Rubi' porque tenía buena relación con él. "Fue mi presidente", dijo, cuando aún estaba en activo como jugador seleccionable para jugar con España. Lo que omitió fue la corta duración en la que ambos coincidieron por los pasillos de Las Rozas: Piqué abandonó el combinado nacional tras la eliminación en el Mundial de Rusia 2018, el 11 de agosto de 2018. Rubiales fue elegido como presidente de la RFEF poco tiempo antes, el 17 de mayo de ese mismo año. Ni tres meses.

Aunque para incongruencia, la propia Supercopa de España. En una entrevista con Valdano para Movistar+, Piqué criticó la Superliga de clubes: "Esto es capitalismo puro y duro". En Twitter, también fue claro, asegurando que "el fútbol pertenece a los fans". Todos estos pensamientos tan contrarios al 'fútbol moderno' dejaron de importar cuando el beneficiario de las comisiones por la organización de un torneo era Kosmos, su empresa. En ese momento, 'la pela' importó más que los aficionados, ya que no le importó que los seguidores de Real Madrid, Valencia, Atlético e incluso los suyos propios, los del FC Barcelona, se tuviesen que conformar con ver el partido por televisión. Fuga de valores, a razón de cuatro millones de euros anuales.

Piqué y los árbitros

La RFEF es el organismo encargado de asignar a los árbitros que pitan en cada encuentro que se disputa en Liga y Copa del Rey. Piqué no tuvo reparos en escribir a Luis Rubiales, presidente federativo, para quejarse del arbitraje entre el Barcelona y la Real Sociedad en la temporada 2019-2020. Al preguntarle 'Rubi' sobre los árbitros, el central contestó "Jodidos, hoy la han liado". "No han consultado el VAR y era penalti clarísimo. Y los del VAR tampoco han dicho nada. Tendrían que haber avisado al árbitro. Sobre todo si pitas el de Busi en la primera parte", explicó el azulgrana vía whatsapp al responsable último del arbitraje en España.

Pese a lo probatoria de esta conversación, Piqué, un día antes de la filtración de este audio, aseguró que no existe un trato de favor hacia su persona o hacia un club. "¿Crees de verdad que un presidente de la Real Federación Española por un acuerdo en el cual se ha beneficiado la Federación va a coger a un árbitro y le va a decir: mira ahora pita a favor del Andorra? Mírate el partido de Promoción del año pasado contra la Real Sociedad B. Acabamos con nueve y penalti en contra y quedamos eliminados. Y era para matarlo al árbitro. Pero no pasa nada, es fútbol".

Esto último no concuerda con lo que dijo en su entrevista con el youtuber DJMariio, en la que puso en duda la imparcialidad arbitral al decir que "un exárbitro, que no recuerdo quién era, quizás Iturralde, decía que el 85% de los árbitros son del Madrid. Es una estadística que se dijo, lo puedes mirar. ¿Cómo no van a pitar a favor del Madrid?". El central prosiguió: "Inconscientemente cómo no van a tirar más de un bando que del otro si al final eres de un club… y respeto totalmente la profesionalidad de los árbitros y sé que intentan hacer el mejor trabajo posible, pero cuando llega un momento de duda tienen que tirar para un lado u otro"

Según el color del cristal...

Los audios que publica El Confidencial también desvelan cómo Piqué quiso contar con la intervención de Juan Carlos I. El objetivo es que hiciese de intermediario entre Kosmos, la RFEF y los líderes políticos de Arabia Saudí. "Rubi, ¿crees que acercándonos al Rey... puede ayudar… que tiene muy buena relación con la gente de allí, con los reyes o quien sea de los saudíes?", dijo Piqué en una nota de voz en mayo de 2019. "Porque podemos entrar fácil. Yo sé que es… Tú, supongo que también puedes entrar… Pero creo que el Rey aquí nos podría ayudar seguro. El emérito, ¡eh!".

Una vez más, 'business is business'. Pese a que Piqué nunca se manifestó en contra de los pitos al himno nacional en las múltiples finales de Copa del Rey que ha jugado con el Barcelona, tampoco los señaló e incluso llegó a justificarlos. "Es muy respetable que cada cual de su opinión", señaló en 2015. Pero no tuvo impedimentos en recurrir al objetivo de esas pitadas, el rey emérito, para sus intereses económicos personales. Una incongruencia más de las muchas que giran en torno a la cabeza del central azulgrana.

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