El FC Barcelona elige presidente. 109.637 socios podrán votar en las urnas de las 136 mesas que se han instalado en una de las explanadas del Camp Nou, que se abrirán a las 09.00 horas y doce horas después se cerrarán para iniciar un recuento que debería arrojar un ganador sobre las 22:30 horas. El nuevo presidente dirigirá el club, salvo incidentes de algún tipo, hasta el 30 de junio del 2021. Los cuatro candidatos votarán con media hora de diferencia a primera hora de la mañana: Josep Maria Bartomeu (09.00 horas, mesa 12), Joan Laporta (09.30 horas, mesa 66), Toni Freixa (10.00 horas, mesa 48) y Agustí Benedito (10.30 horas, mesa 14).
Dos son los claros aspirantes, los dos expresidentes: Josep María Bartomeu y Joan Laporta. El primero concurre concurre avalado por los éxitos deportivos del Barcelona de Luis Enrique y la consecución del triplete. Unos triunfos que han maquillado los escándalos judiciales protagonizados por el club, Bartomeu y Rosell en la compra del brasileño Neymar. Bartomeu ha realizado una campaña de perfil bajo, sin más triunfalismos que los deportivos y advirtiendo que bajo su mandato han logrado estabilizar al mejor Barcelona financieramente hablando de su historia. Algo que los datos han cuestionados. Recientemente se ha sabido que la masa salarial de la primera plantilla de fútbol reúne el 68,6 % del presupuesto. Una cifra que evidencia el desequilibrio de las cuentas.
Bartomeu se ha abrazado a los éxitos deportivos y Laporta ha ido creciendo con la campaña
Enfrente aparece Joan Laporta. Excesivo, eufórico, verborreico… A medida que la campaña ha ido quemando etapas, el ex presidente se ha ido viniendo arriba. Presentó a Eric Abidal como su director deportivo y ha recibido un espaldarazo deportivo en las últimas horas por parte de su amigo Milo Raiola, agente de Pogba, del que que ha dicho que “tiene muchas posibilidades de acabar en el Barcelona si gana Laporta”. El ex presidente ha atacado a su contrincante, advirtiendo que es “Bartrusell. Bartomeu y Rosell en la misma persona. Si hubiera tenido decencia, no se habría presentado”. También ha advertido que “el nuñismo se presenta con una cara nueva: Bartomeu”. Y le ha culpado de llevar al club a los tribunales acusado de fraude fiscal, “lo que es intolerable”. Por último, en la guerra de patrocinadores, advirtió que su idea es recuperar Unicef para la camiseta del Barcelona.
Los sondeos advierten una intención de voto cercana entre ambas candidaturas. Cada una se arroga la ventaja, pero la igualdad es máxima. De ahí que Laporta haya sugerido a Benedito y Freixa que se fusionen con su candidatura para convertir el voto en útil y derrocar a Bartomeu. Algo a lo que se han negado tanto Benedito, colaborador suyo en otro tiempo, y Freixa. Por detrás de ellos no pasaron el requisito de las firmas Joan Batiste (2.518), Jordi Majó (901) ni Jordi Farré, que ni siquiera entregó las papeletas.
Los votantes de Freixa y Benedito desequilibrarán la balanza final
Entre los temas más espinosos de la campaña destacan la convocatoria de elecciones en sábado, cuando habitualmente se venía celebrando en domingo, lo que podría dejar la participación alrededor del 50%. También ha sido muy contestada la actuación de la junta gestora presidida por Ramon Adell. Esta junta ha sido criticado por casi todas las candidaturas debido a la toma de decisiones tanto en los fichajes (Aleix Vidal y Arda Turan) como en las ventas (Gerard Deulofeu).
La clave de las elecciones depende, por tanto, de si los votantes de Freixa y Benedito deciden apoyar a Laporta o sigue respaldando a sus candidatos, como espera Bartomeu. Si ocurre lo primero, Laporta podría recuperar la presidencia del Barcelona. Si ocurre lo segundo, Bartomeu retomará la dirigencia del club, antes de acudir a los juzgados a resolver los contenciosos por el caso Neymar.
