En un deporte plagado de egos y envidias, es raro encontrar a alguien que hable mal de Mark Webber. Considerado un buen piloto y un tipo cabal, sus opiniones son tenidas muy en cuenta. De ahí que no sea baladí lo que ha declarado públicamente sobre el desenlace del Mundial a una televisión de Austria, país donde precisamente tiene su sede Red Bul.
Según el australiano, si el título se decide el fin de semana del 23 al 25 de noviembre en el GP de Brasil, última cita del curso, Vettel debería preocuparse si la predicción meteorológica anticipa lluvia. "Sebastian necesita un tiempo seco allí", manifestó en Servus TV. "También sabe pilotar con lluvia, pero Fernando es muy fuerte", razonó obviando que el germano obtuvo en 2008 la pole y su primer triunfo en F1 en un GP de Italia pasado por agua. Y no lo hizo al volante de un excelso Red Bull, sino de un modesto Toro Rosso, equipo filial de la marca energética.
"Puede llover en Sao Paulo", insistió Webber. Y apuntó otro factor que puede influir en el desenlace del campeonato y que apunta a la línea de flotación psicológica de Vettel: su presunta debilidad mental en momentos decisivos y de presión máxima. Así, el australiano recordó los numerosos percances y accidentes múltiples que se dan en el exigente circuito brasileño de Interlagos. Y fue más allá. "En Sao Paulo siempre hay algo de drama", destacó. Y abundando en el concepto pronosticó un final de temporada "muy dramático".
No se conoce cuando hizo Webber estas declaraciones a Servus TV, pero resulta evidente que no está muy contento con su equipo después de la mala carrera en Abu Dabi. Salió mal, perdió posiciones claves, no pudo retener a Fernando Alonso detrás y se vio involucrado en varios lances de carrera que finalmente le llevaron a abandonar. Con todo, seguramente lo que peor le ha sentado son las duras palabras de Helmut Marko, asesor deportivo de Red Bull, en el diario Bild: "No se pueden tener más errores en una carrera. No fue un buen día para él. La salida no fue buena y los accidentes tampoco. Es malo porque nos afecta en el campeonato de Constructores".
El abandono de Webber en Yas Marina impidió que Red Bull se proclamara campeón del mundo por equipos, pero este título es virtualmente suyo pues sólo debe sumar cinco puntos en las dos pruebas que faltan. Otra cosa será el de pilotos.
Vettel le saca diez puntos a Fernando Alonso, pero hay varios flecos sueltos que pueden decidir el desenlace. O, como pronostica Webber, igual el nombre del tricampeón más joven de la historia de la F1 depende del tiempo que haga el 25 de noviembre en Sao Paulo.
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