Mesut Özil ya no es jugador del Real Madrid. Lo es del Arsenal. El acuerdo entre ambos clubes se cerró el pasado domingo, una vez que el padre y agente de Mesut Özil había dado su ok al club inglés para que negociara su fichaje y ambos clubes fijaran su salida en 42 millones, más otros 3 en variables.
El centrocampista alemán, desplazado por Carlo Ancelotti a una banda tras la llegada de Isco y suplente este domingo en el partido de Liga contra el Athletic, tenía claro que quería abandonar el Bernabéu. El propio jugador confirmó a última hora del lunes y desde Alemania su fichaje por el Arsenal. "Quiero ayudar al club a ganar títulos de nuevo", dijo.
El Arsenal, que como informamos en 'VozPópuli' se interesó por el fichaje de Di María, se encontró con la posibilidad de contratar al alemán precisamente cuando el Real Madrid, a instancias de Ancelotti, se negó a trasparar al argentino, si bien dio el visto bueno a la posibilidad de negociar por Özil. Arsène Wenger, un enamorado del centrocampista desde que jugaba en el Werder Bremen, no lo dudó ante la posibilidad de hacerse con él. Pujó fuerte, sobre todo porque el Manchester United también pretendía al todavía jugador del Madrid, pero no llegó a la cantidad que éste pedía por temporada.
Este lunes por la mañana, la prensa alemana informaba que Özil estaba pasando reconocimiento médico con el Arsenal en Múnich. Mientras tanto, y durante la presentación de Gareth Bale, en el Santiago Bernabéu se escucharon gritos de "¡Özil, Özil!" y "¡Özil no se vende!", a los que Florentino Pérez respondió girándose hacia la grada y llevándose el dedo índice a los labios, un gesto pidiendo silencio que repitió en varias ocasiones.
La decisión del presidente no ha sido bien recibida por gran parte del madridismo. Aunque habrá un sector de aficionados y de la prensa que hará ver que Özil tampoco era para tanto, en tres temporadas con la camiseta blanca el ex del Bremen ha dado 50 asistencias en Liga y 74 en el total de las competiciones. Mesut llega a un equipo que se ajusta perfectamente a sus cualidades. "Gracias por tres años maravillosos", fue el mensaje del alemán a los aficionados del Real Madrid.