El polaco Michal Kwiatkowski se enfundo el maillot arcoiris de campeón del Mundo merced a un ataque en el último descenso que le permitió llegar en solitario por delante del australiano Simon Gerrans y del español Alejandro Valverde, plata y bronce, respectivamente.
Kwiatkowski, de 24 años, hizo honor a su apodo de "Tigre del Báltico". Su equipo trabajó todo el día, pero en el momento clave supo dar el zarpazo sorprendiendo a todos sus rivales, que ya no le pudieron dar alcance. Bastó un ataque a 5 kilómetros de meta, en la bajada del Mirador.
Por detrás le persiguieron los favoritos, con Valverde entre ellos, pero Kwiatkowski abrazó la gloria por delante del australiano Simon Gerrans y de Valverde, de 34 años, quien sumó su sexta medalla, la tercera consecutiva de bronce.
El español aseguró tras la carrera que la medalla de bronce le deja "un buen sabor de boca" y explicó que arrancó en el tramo final de la carrera y "por lo menos ha servido para el bronce".
Valverde dijo que el tercer puesto "corriéndose el Mundial en España está muy bien" y dio las gracias "a la afición", a su familia y a su mujer. "Me habría gustado el oro, pero no ha sido posible", dijo, a la vez que agradeció el "gran trabajo" de sus compañeros de selección.
Por otra parte, los coches de las selecciones de Noruega y Croacia que seguían la prueba del Mundial en ruta de Ponferrada sufrieron un accidente en el que resultó herido el técnico croata con diversas fracturas.
En el accidente, que se produjo en uno de los descensos del circuito, el coche de Noruega se salió de la carretera y su conductor fue trasladado al hospital de la capital berciana. El técnico croata ha sufrido fractura de un brazo, una pierna y la cadera
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