La badalonesa Mireia Belmonte ha coqueteado con el bronce en la final de los 800 metros libres, pero finalmente ha terminado en cuarta posición, testigo de excepción de la brutal exhibición de una extraterrestre Katie Ledecky. La española, con todo, realizó una gran carrera y terminó batiendo el récord de España (8.18.55).
Ledecky, en una distancia predilecta para ella, ganó con superioridad la prueba, batiendo holgadamente (por casi dos segundos) su propio récord del mundo. La plata fue para la británica (galesa) Jazmin Carlin y el bronce, para la húngara Boglarka Kapas.
Mireia, como su propio entrenador advertía, acusó la fatiga de unos Juegos en los que ha nadado una tremenda kilometrada. Con todo, nadó más rápido que hace cuatro años en Londres 2012 y se marcha de una prueba tan exigente con la cabeza muy alta.
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