Al grito de 'Nankurunaisa'. Ricky Rubio volverá a ser jugador de la Liga Endesa (ACB) tras hacerse oficial su fichaje por el Barcelona. Desde que el base español anunciara a principios de la semana pasada su vuelta a las canchas para entrenarse con el equipo culé, las sensaciones de ambas partes no han podido ser mejores. "Llevo semanas dándole vueltas y tras otras tantas trabajando mente y cuerpo me veo con ganas y fuerza para ver cómo reacciono con un balón en mis manos", afirmaba Ricky Rubio en sus redes sociales.
El jugador se ha sentido como en casa, confirmando las buenas sensaciones y la ilusión que desprendía previamente a su puesta en escena. En la misma línea se ha manifestado el propio entrenador azulgrana, Roger Grimau, viejo conocido además del jugador español, quien compartía públicamente elogios hacia el de El Masnou a la par que también se pronunciaba el presidente de la entidad Joan Laporta en una entrevista. "Espero que Ricky Rubio sea jugador del Barcelona. En mi primera etapa como presidente ya le fichamos y estamos muy ilusionados. Dará un impulso al nuevo proyecto del basket azulgrana. Será una muy buena incorporación", asumía Laporta ante los micrófonos y las cámaras de RAC1.
Ahora, el contrato se ha hecho público y la vinculación del jugador español con el equipo catalán ya es completamente oficial, una noticia positiva para los aficionados culés, las aspiraciones de Scariolo con la selección nacional y para el baloncesto en general.
El acuerdo de Ricky Rubio y el Barcelona: el jugador marcará las pautas
El Barcelona ha inscrito al jugador en la ACB y en la Euroliga después de haber realizado las pertinentes pruebas médicas en la Ciudad Deportiva Joan Gamper y en el Hospital de Barcelona. No obstante, su regreso oficial a la competición llegará cuando el propio Ricky Rubio lo considere oportuno, anuncia el comunicado. Ahora es Roger Grimau quien tiene la misión de hacerle encajar en una plantilla ya hecha. En ella, el base español compartirá espacio en el puesto con Tomas Satoransky y un Rokas Jokubaitis que seguro dispute más minutos como escolta, al igual que Nico Laprovittola.
Ricky Rubio ha estado entrenando a las órdenes de Grimau durante la última semana, después de anunciar que se encontraba en la "recta final de su recuperación". Unos problemas que le impidieron, por ejemplo, acudir al pasado Mundial con España, abandonando la concentración a principios de septiembre, unos días antes de viajar a Indonesia y que también le llevaron a rematar su carrera en la NBA.
Todo ello hace que su vuelta a las pistas sea un halo de esperanza para los aficionados, aunque parece ser que estos últimos deberán esperar algo más para volver a verle jugar: el 1 de marzo, en el Palau ante el Mónaco (partido de Euroliga) podría ser la fecha de su retorno, pero aún es pronto para asegurarlo con rotundidad. Es más, en el club azulgrana tampoco ponen cita de regreso: todo dependerá que las pautas y los ritmos que el jugador marque próximamente.
¿Qué hay detrás del divulgado término procedente de la cultura oriental?
Cada vez son más los términos orientales que se adoptan en Occidente para dar significado a algo en concreto. Su concepto abstracto hace que el intercambio cultural sea más enriquecedor y que poco a poco florezcan más palabras proclamadas como virales, sobre todo, en las redes sociales. Ejemplos de ello son 'ikigai' (vivir con un propósito) o 'kintsugi' (la belleza de la imperfección), ambos extendidos desde oriente y manifestados en toda la región europea.
El último en hacerse eco ha sido ha sido el término 'nankurunaisa', que entraña una de las lecciones de vida más sencillas, pero con mayor potencial. Se trata de una referencia japonesa que proviene de un dialecto antiguo y perdido, concretamente ubicado en la isla de Okinawa. Se divide en tres ideogramas: 'nankuru', 'nai' y 'sa' y su significado original, bastante extenso, es: "Nunca olvides quién eres y vive por hoy y por el mañana. Que jamás se te olvide sonreír y, por terrible que haya sido tu día, recuerda que el próximo sol te recibirá con una gran sonrisa. Tú haz lo mismo". Un aliento de consuelo.
Actualmente, su significado se ha ido acortando hasta el punto de llegar a significar algo parecido a "todo se arregla con el tiempo". Este famoso refrán que Ricky Rubio compartió en sus redes sociales al inicio de sus problemas funciona como un mantra, una palabra que protege la mente y que invita a afrontar la vida con optimismo y con la esperanza de que "al final siempre acaba saliendo el sol".
A su vez, el término japonés que popularizó el base español encierra muchas de las enseñanzas del budismo y de la sabiduría oriental. "La esperanza es lo último que se pierde" también podría funcionar como buen sinónimo de ello. Sea como sea, Ricky Rubio ha logrado volver a disfrutar del baloncesto al ritmo y efecto de 'Nankurunaisa', algo que no le ocurría desde el 4 de enero de 2023, momento en el que tomó la decisión de rescindir el contrato con su hasta entonces equipo de la NBA, los Cleveland Cavaliers. Ese fue el inicio del extenso martirio con el que ha tenido que convivir el catalán hasta completar, hace escasas horas, su acuerdo con el Barcelona.
El retorno al Barcelona: el club que lanzó a Ricky Rubio a la liga estadounidense
Dejando atrás su ciclo profesional en la liga norteamericana, en el que disputó 698 partidos de temporada regular y tres playoffs (dos con los Jazz y uno con los Cavaliers), Ricky Rubio vuelve a España para preparar esa "última fase" de su recuperación, justamente allí donde lo vieron crecer. "¡Te acogeremos como uno más de la familia!", contestó en redes sociales el Barcelona a su comunicado.
Ricky Rubio es puro instinto, una veloz inteligencia natural en una época en la que sólo se fabrica la artificial. El Barcelona tenía hasta mañana, 7 de febrero, para inscribir su nombre en la plantilla. Eso y la inminente Copa del Rey han servido de alicientes en una agenda que durante meses estuvo ocupada por lo esencial y que borró todo lo referente a lo profesional. La saturación de adrenalina competitiva necesitaba un barbecho y el vestuario culé parece que llevaba meses esperándolo, más aún tras una primera vuelta donde ha aguantado en la Liga Endesa y Euroliga en posiciones altas tras los cambios de idea y juego y de varios líderes interiores estadísticos.
En los dos cursos que Ricky Rubio vistió la camiseta blaugrana disputó 140 partidos oficiales y logró levantar ocho títulos: dos Lligues Catalanes, dos Supercopas, dos Copas del Rey, una Liga ACB y una Euroliga. La segunda copa europea de la historia del Barça llegó de las manos del entonces capitán Roger Grimau, el actual entrenador del club blaugrana y uno de los alicientes para el retorno de Ricky Rubio al Barcelona. Además, de ese equipo que logró el reconocimiento internacional, ahora también coincidirá con el actual manager Juan Carlos Navarro y con el ayudante Víctor Sada.
De llegar a alcanzar de nuevo su mejor imagen durante este tiempo, Ricky Rubio podría liderar, además, la lista de Sergio Scariolo de cara al Preolímpico de Valencia que se disputará entre el 2 y el 7 de julio. En él, España se jugará la clasificación para los próximos Juegos Olímpicos de París. Tan solo tendrá una baza: conseguir ganar el torneo y la única plaza en juego. Para ello, la selección española se verá las caras con Angola, Líbano, Finlandia, Bahamas y Polonia.
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