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Alonso se queda sin título por la presencia del espectral comisario de la bandera verde

Salvo vuelco inesperado, Fernando Alonso no ganará el Mundial de Fórmula 1 en los despachos. La FIA ha sacado su artillería mediática y avisa a Ferrari: "Nunca tuvimos dudas de que el adelantamiento de Sebastian Vettel fue legal".

Ferrari sabía que era muy difícil, por no decir imposible, que la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) reconociera un error propio –si lo hubiera- de un calibre tal como para cambiar el destino del campeonato del mundo de pilotos de Fórmula 1. Por eso, cuando Fernando Alonso y su entorno se empeñaron en agitar a la opinión pública, especialmente a la española y a la italiana, actuaron con prudencia. El asturiano y sus terminales mediáticas más próximas aseguran que Vettel adelantó a Vergne en el GP de Brasil con bandera amarilla en pista, algo prohibido. Y un vídeo así parecía demostrarlo… hasta que apareció un espectral comisario que, presuntamente, agita una bandera verde (permiso para adelantar).

Antes de lanzarse a reclamar formalmente –trámite cuyo plazo expira este viernes 30 de noviembre-, la escudería italiana hizo una consulta por escrito sobre la polémica maniobra. Y la respuesta no oficial de la FIA ha sido contundente: no hay nada que hacer.

"Vettel lo hizo todo de manera correcta. Él reaccionó a una bandera verde que estaba 350 metros delante del último semáforo amarillo", declaró Charlie Whiting, director de las carreras de F1, a la revista 'Sport Bild'. "Nunca tuvimos dudas de que ese adelantamiento fue legal porque la bandera verde anula la señal amarilla que prohíbe los adelantamientos”, añade Whiting. “Además, ninguno de los pilotos que iban por detrás de Vettel se quejaron por radio, que es lo habitual cuando se incumple alguna norma”.

Otro portavoz de la FIA citado también por ‘Sport Bild’ fue más allá y asegura que la acción del alemán fue investigada ya durante la propia carrera de Interlagos: "Vettel no hizo nada mal. Había señales y banderas contradictorias, ello se investigó ya durante la carrera con el resultado de que no debe haber sanción alguna". Según esta publicación alemana, ese portavoz afirma rotundo que el título de su compatriota Vettel “no está en peligro. No habrá nuevas investigaciones".

Las claves de un espinoso asunto que, o se zanja este viernes –si Ferrari no recurre oficialmente-, o se convertirá en el penúltimo culebrón de la F1 son las siguientes:

-Un abonado inglés a la cadena de pago Sky TV, cuya realización permite al televidente presenciar la carrera desde distintos ángulos, está siguiendo el GP de Brasil ‘a bordo’ del Red Bull de Vettel. En la vuelta 4 asiste al adelantamiento de este a Vergne con las luces amarillas encendidas en las señales del circuito y en el volante de Sebastian. Sube el vídeo a youtube y provoca una polémica universal.   

- Aparecen más grabaciones de esa maniobra. De forma inexplicable, en algunos vídeos se aprecia de forma borrosa a la izquierda lo que parece un comisario agitando una bandera verde, pero en otros vídeos del mismo adelantamiento no figura dicho comisario, Se desatan las especulaciones sobre posible manipulación de imágenes en uno y otro sentido.

-Según informa la Cope, hay varios equipos que sí detectaron en el GPS con el que siguen al todos los participantes el adelantamiento de Vettel con bandera amarilla. Concretamente citan a Williams como una de esas escuderías que confirma la presunta ilegalidad.

- Instantes antes de cruzar la meta tras el coche de seguridad que cerró edl GP de Brasil, Vergne, piloto de Toro Rosso -equipo filial de Red Bull- levanta el pie de forma ostensible, como queriendo dejar más de 20 segundos respecto a Vettel para que este, en caso de sanción, sólo perdiera la plaza con Schumacher (7º) y conservara el título. Al francés no le dio tiempo a ralentizar el ritmo lo suficiente y entró a 19,2 segundos de Sebastian.

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