Un jugador de la UD Tomares, equipo sevillano que juega en Preferente Senior, ha sido sancionado con 2 partidos y 6 meses de suspensión más 234 euros de multa después de agredir con una silla y perseguir en su coche al árbitro del partido que les enfrentó con la UD Morón.
Los hechos comenzarón cuando el colegiado amonestó a uno de los suplentes del Tomares por protestar. Finalizado el partido, el árbitro redacta en el acta lo siguiente referido al citado futbolista: “Una vez nos encontrábamos en la puerta del vestuario arbitral, me escupió, alcanzándome en el tórax”.
Todo indica que el jugador se temió precisamente que el árbitro redactara esa actitud, se presentó en el vestuario y a partir de ahí pasó lo siguiente:
“Al abrir la puerta de mi vestuario, al finalizar la confección del acta para entregar la copia de la misma a ambos equipos, irrumpió en mi vestuario de forma violenta el jugador del Tomares, el cual comenzó a leer el acta mientras me decía: 'a ver qué me has puesto para echarme'. Al ver el contenido, comienza a decirme: '¿qué has puesto?' , '¡te voy a matar hijo de puta, de aquí no sales!', empujándome violentamente con las dos manos contra la pared, y cogiendo una silla del vestuario y lanzándola contra mí, la que me golpeó en la rodilla izquierda, acorralándome en la esquina de la ducha del vestuario levantando su puño en alto, mordiéndose la lengua diciendo: '¡te daba así y te mataba!' teniendo que ser sacado de mi vestuario por mis asistentes y delegado visitante, consiguiendo cerrar la puerta la puerta de mi vestuario dejando al delegado visitante dentro".
"Ante esta situación llamamos a las FOP desde mi móvil, personándose en las instalaciones 10 minutos después una pareja de la Guardia Civil -prosigue el acta-. Debido al estado de ansiedad en el que me encontraba y el golpe sufrido, decido no terminar el acta allí y abandonar las instalaciones escoltado por las FOP. Las FOP me acompañan hasta la salida de la población de Tomares, continuando el viaje hasta la mutualidad. En el transcurso del desplazamiento, un coche comienza a hacerme señales y a perseguirme, hasta ponerse a nuestra altura, comprobando que se trataba del citado jugador, el cual comienza a decirme: 'hijo de puta, te vas a enterar, quédate con mi cara', marchándose sin más. Por dicho motivo, para evitar incidentes, decido poner la denuncia inmediatamente en la localidad más próxima".
El sindicato de árbitros ha puesto el grito en el cielo ante una sanción con la que no están de acuerdo: "Desde luego al leer semejante sanción lo único en lo que podemos pensar es en cuál es su finalidad. ¿Erradicar a todos estos violentos del mundo del fútbol? Desde luego que no. De la multa económica ni hablamos porque sin duda es irrisoria. Pero la sanción disciplinaria nos deja estupefactos. ¿De verdad nuestras federaciones piensan que con estas medidas van a conseguir algo? En 6 meses personajes de este calibre podrán volver a calzarse las botas, entrar en un terreno de juego y volver a actuar del mismo modo. Y, por qué no, dedicarse a intimidar a todo aquel que no actúe conforme ellos piensen".
"¿A qué esperan nuestros dirigentes para actuar en serio?, ¿a que ocurran hechos “serios”?, ¿debe morir alguien?", se pregunta el sindicato arbitral.