Hoeness está imputado por haber evadido presuntamente unos 3,2 millones de euros a través de una cuenta bancaria en Suiza que tuvo durante años sin conocimiento del fisco alemán. A comienzo del año pasado fue el propio dirigente del Bayern quien se autodenunció con la esperanza de poder librarse del proceso judicial.
La "autodenuncia" es una figura que permite en Alemania a un evasor escapar del proceso penal a cambio del pago de la deuda de impuestos con intereses y de una multa, pero se exige que sea completa y que se produzca antes de que las autoridades hayan abierto una investigación.
Sin embargo, Hoeness no pudo evitar finalmente el juicio después de que la Audiencia Provincial de Múnich diese el pasado 4 de noviembre trámite a la acusación presentada por la fiscalía. A pesar de la presión ocasionada por este caso, Hoeness se ha mantenido durante todos estos meses en su cargo al frente del club muniqués, que le ha mostrado abiertamente su apoyo en reiteradas ocasiones,
Los socios también mostraron abiertamente su respaldo al directivo durante la asamblea general de noviembre durante la cual le tributaron una sonora ovación que provocó las lágrimas de Hoeness. "Sin Uli Hoeness el Bayern no sería lo que afortunadamente es y representa", dijo el presidente del Consejo Directivo Karlheinz Rumennigge en aquella ocasión.
Los miembros de la plantilla también se mostraron favorables a la continuidad de Hoeness e incluso el jugador internacional alemán Toni Kross llegó a manifestar que "el Bayern es inimaginable sin Hoeness. Es parte del club". Por su parte, el técnico español Pep Guardiola dijo el pasado viernes en rueda de prensa que aunque lo conoce "desde hace siete meses", Hoeness es su "amigo" y lo será "para siempre".
Incluso el primer ministro de Baviera, el conservador Horst Seehofer, opinó en mayo que presionar a Hoeness para que dimitiese era faltar el respeto a todo lo que éste había logrado en su carrera como jugador y directivo deportivo. "Desde mi punto de vista es respetable que Uli Hoeness siga en su cargo hasta que la fiscalía aclare el caso", dijo entonces Seehofer en declaraciones a la edición digital del diario 'Münchner Abendzeitung'.
Sin llegar a ser un caso como al del ex presidente del Sevilla, José María del Nido, para quien el presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF), Ángel María Villar, el de la Liga de Fútbol Profesional (LFP), Javier Tebas, 13 presidentes de clubes de Primera y 14 de Segunda pidieron el indulto, parece que España no es el único país donde el mundo del fútbol protege a sus dirigentes ante la justicia. En Alemania, como pasó en Barcelona con Messi, también se aplaude a lod defraudadores fiscales.
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