Si hace unos días Anne Igartiburu, de 51 años, confirmaba la separación matrimonial de su todavía marido, Pablo Heras-Casado, ahora ha desvelado que tuvo un problema que la llevó a ir a terapia durante doce años.
La presentadora de TVE desveló este aspecto hasta entonces desconocido a María del Monte, con la que ha participado en el programa 'Dos parejas y un destino', el nuevo programa de La 1.
Las dos recorrieron algunas zonas de Castilla-La Mancha y se abrieron en canal la una con la otra. La vasca acabó confesándole a la cantante que la fama, la popularidad y la exposición mediática no es nada fácil y que le afectó.
"Estos 12 años en psicoterapia me han ayudado a conocerme mejor"
"La autoexigencia es muy mala", señaló, para después añadir lo mucho que le había afectado que se hablar de ella y de su vida privada: "Eso de enjuiciarme y enjuiciar lo que tengo fuera... Estos 12 años en psicoterapia me han ayudado a conocerme mejor".
Del Monte reflexionó: "La gente te ve diciendo 'hola corazones' y se cree que todo está bien”, a lo que Anne respondía: "Pero es muy cerrado no intuir que más allá del 'hola corazones' no haya más allá. Es como si a ti solo te ven cantando sevillanas y no piensan que hay más...".
Anne además afirmó que para ella un lujo es "hacer lo que quiera con y cuando quiera". Tras la buena conexión que han tenido gracias al programa, María le decía entonces: “Eres una tía que merece la pena conocer”.
Una separación y tres hijos
Anne Igartiburu se encuentra ahora en una etapa delicada ya que acaba de separarse tras cinco años de matrimonio del director de orquesta, Pablo Heras-Casado con el que tiene un hijo de 4 años, Nicolás. Además ella tiene otras dos hijas, Noa y Carmen, que adoptó antes de conocerle.
Sin embargo, la presentadora ha asegurado que aunque hayan decidido emprender caminos por separado, se llevan muy bien y siguen viéndose. Mientras ella se ha quedado con sus hijos en la casa familiar, él se buscó un piso cerca del Teatro Real, donde trabaja.
Anteriormente, Anne estuvo casada con el bailarín Igor Yebra, con el que se casó por todo lo alto en el año 2004 tras tres años de relación. El matrimonio no llegó a celebrar el segundo aniversario de su boda. Mientras estuvieron casados, la presentadora adoptó a su hija Noa.
María del Monte confesó: "Yo estoy acostumbrada a fingir que no tengo miedo"
Por su parte, María del Monte también le confesó a su compañera de viaje lo mucho que está sufriendo tras la muerte de su hermano Antonio durante el confinamiento por el coronavirus, falleció en abril de 2020. "Yo estoy acostumbrada a fingir que no tengo miedo, que no tengo pena, mis penas y mis tragedias me las tengo que comer", comenzó diciendo.
La cantante se enteró de la noticia mientras estaba viviendo con su madre de 95 años. Al estar delicada de salud, la familia le ocultó la muerte de su hijo. "Su muerte es el palo más grande que a mí me ha dado la vida", reconocía. "Era mis pies, mis manos, mi cómplice, mi alma gemela. Nos entendíamos con la mirada y no entraba en mis planes que esto ocurriera, pero la vida es sabia y no me puedo derrumbar porque tengo gente a mi alrededor que me necesita", confesó visiblemente emocionada.
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